Sociedad
El dilema de elegir estudios universitarios

Los estudiantes quieren ser médicos, el mercado demanda matemáticos

Las carreras con menos tasa de paro no están entre las más solicitadas por los estudiantes. A la hora de escoger los expertos recomiendan no imponer las expectativas de empleo a la vocación.

Madrid

Los estudiantes universitarios españoles quieren ser, sobre todo, médicos, veterinarios y enfermeros pero el mercado reclama más matemáticos, estadísticos, servicios de seguridad y abogados. Son las carreras más demandas frente a los estudios con menos tasa de paro. La comparación sale de cruzar los datos de Encuesta de Población Activa (EPA) de 2014  con los del Ministerio de Educación sobre los grados más solicitados,  los más recientes son del curso 2012-2013.

Con esos datos en la mano hay una primera conclusión clara: para tener trabajo seguro nada más salir de la universidad hay que estudiar matemáticas. Según la última EPA, es la carrera con menos tasa de paro, un 5,7%. Sin embargo, no es de las preferidas de los estudiantes: está en el puesto décimo octavo según el orden de demanda. "Es una titulación que tiene muy pocos alumnos", apunta Juan Antonio Planas, orientador presidente de la Asociación Aragonesa de Psicopedagogía. "Las titulaciones tipo matemáticas, física, química...siempre han asustado. Se nota ya en bachillerato donde hay menos alumnos. Como hay pocos estudiantes son titulaciones muy polivalentes. Quienes duden sobre qué estudiar, pero tengan buena capacidad para este tipo de materias, deben saber que tienen muy buena inserción profesional".

Muy polivalentes son también los abogados, capaces de trabajar casi en cualquier sector. Su tasa de paro también es de las más bajas, algo más del 10%, y tampoco están entre las diez carreras más solicitadas, es la décimo primera. Hay estudios, sin embargo, que lo tienen todo: veterinaria y medicina combinan bajas tasas de desempleo, del 10 y el 12%, con ser las más demandadas.

Ante el dilema de elegir estudios los expertos recomiendan, en cualquier caso, no imponer las expectativas de empleo a la vocación. "Primero porque son circunstancias cambiantes", subraya Juan Antonio Planas, "segundo porque esa es la situación en este momento en España, pero una persona no tiene porqué ponerse fronteras a uno mismo. Y en tercer lugar porque posiblemente asistiremos a procesos pendulares". Es decir, lo más demandado hoy puede ser un sector en crisis mañana. Arquitectura es un buen ejemplo de eso. De estar entre las carreras más solicitadas y con buenas expectativas laborales ha pasado a tener una tasa de desempleo de casi el 24%. Pero nadie sabe que puede ocurrir en unos años. "Lo importante es estudiar algo te guste y para lo que estés especialmente dotado. Es muy difícil prever las profesiones que va a haber dentro de 10, 15 o 20 años. A lo mejor una titulación como medicina, que ahora tiene una salida muy clara, dentro de 20 años no la tiene tanto o lo que se pide es la variable de la medicina más orientada a la investigación bioclimática...". Planas insiste en que la vocación y los intereses personales deben ser lo primero a considerar a la hora de elegir. Ante la duda recomienda descartar lo que no se quiere estudiar como primer paso.

 
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