El Eurogrupo espera que Tsipras retire el referéndum tras caducar el programa

Bruselas

Tras 5 años de programas de ayuda ha pasado lo que nadie quería: Grecia desde esta medianoche se enfrenta a su caída. El impago al Fondo Monetario se puede resolver a largo plazo si Grecia consigue negociar otro programa pero por el momento, el existente ha caducado sin posibilidad de ningún crédito puente.

Para nada ha servido el cambio de estrategia tardío de Alexis Tsipras que a última hora ha enviado una carta aceptando que su país se encuentra al borde del colapso por no poder pagar y en la que pide un préstamo para los dos próximos años que en la práctica supone otro tercer paquete.

La propuesta de Tsipras implicaba una prórroga rápida del programa actual que ha sido denegada. Los gobiernos del euro no quieren pactar nada si Tsipras mantiene el Referéndum. Y él para retirarlo necesita algún tipo de acuerdo.

La posición, inusualmente dura responde al cansancio que ha generado entre muchos gobiernos " la estrategia negociadora griega" y refleja la "falta completa de confianza hacia Tsipras y su ministro de finanzas", según fuentes de las negociaciones.

Tsipras pedía también en su misiva la reestructuración futura de la deuda "para poder cumplir con sus obligaciones exteriores y internas" pero este es un tema para el futuro porque se ha impuesto la línea dura que marcada otra vez desde Alemania mantiene que aquí no pasa nada si Grecia quiebra.

Francia no lo ve así y teme las repercusiones internas de un debate que si se cierra, demostrando que el Euro puede ser reversible traerá enormes problemas porque destruye los escudos políticos contra Marine Le Pen. Pero el ministro francés de finanzas, Michel Sapin se ha quedado prácticamente solo defendiendo un acuerdo posible antes de agotar el programa.

Y con él también ha fracasado el Presidente de la Comisión, Jean Claude Juncker, y el del Europarlamento, Martin Schultz que han estado intentando que Tsipras hiciera algún tipo de gesto. Pero de nada le ha servido al gobierno de Atenas su último movimiento porque no ha ido acompañada de la renuncia del Referéndum.

Que la consulta unilateral era un problema grave lo han explicado ministros de todos los gobiernos tras la reunión de este pasado sábado. Aunque el Presidente del Europarlamento esperaba que Tsipras anunciara que pediría el SI y que con esto sería suficiente, pero no ha sido así. Tsipras no ha dicho nada que tenga que ver con la consulta y a nivel europeo, los gobiernos más duros han decidido demostrarle por la vía de los hechos consumados que no hay programa sobre el que definirse, forzando de verdad al ciudadano a votar a favor o en contra de la Unión, si al final vota. Porque el Eurogrupo que se reúne hoy una segunda vez espera que Tsipras retire el Referéndum a cambio de un acuerdo político de tipo general que permitirá a Grecia negociar otro tercer rescate pero quedando su futuro inmediato vinculado a la gestión del BCE.

Una opción de alto riesgo para la zona euro aunque los gobiernos del euro liderados por Merkel consigan la dimisión de Tsipras que es en estos momentos, la estrategia europea. Una estrategia avalada por el Partido Popular que ha rechazado los intentos del grupo Socialista por un último esfuerzo antes de agotar el programa.