Ciudadanos evitará el ataque directo a García Albiol en campaña

Madrid

Bandera blanca entre el PP y Ciudadanos en Cataluña. Al menos por parte de los de Rivera, que a pesar de que temen que el efecto García Albiol frene su crecimiento de cara a las elecciones, no pondrán en el centro de la diana al nuevo candidato de Mariano Rajoy.

La formación naranja es consciente de que pelea con los conservadores una parte del electorado y en la dirección creen que no conviene irritar a ese grupo de votantes con un discurso duro. Ni siquiera en contra de Albiol por sus declaraciones sobre los inmigrantes. Preguntados por esta cuestión, varios dirigentes y miembros de la lista de Arrimadas se niegan a valorar públicamente algo que dicen "no interesa a los catalanes".

A pesar de ello creen que eligiendo al ex alcalde de Badalona, donde ellos sólo consiguieron un concejal en los pasados comicios, Rajoy perderá por el centro los votos que quiere ganar por la derecha.

"Nosotros no vamos a pensar en si retenemos o quitamos apoyos al PP, no es nuestro objetivo ni está dentro de nuestro campo de visión", asegura Carlos Carrizosa número dos de la lista de la candidata a las Generalitat. "Lo que sí es convencer a la gente de que tenemos que ganar a Mas y Junqueras". El partido de Rivera es consciente de que interesa mantener una buena relación con el PP de cara al día después de los comicios. La idea es que, si la aritmética electoral lo permite, la suma de Ciudadanos, populares y PSC frene las aspiraciones de la candidatura unitaria.

Un frente de partidos constitucionalistas del que los de Pedro Sánchez ya se han descolgado. Sin embargo fuentes de la dirección naranja confían en que Pedro Sánchez, que se envolvió en la bandera para su proclamación, no permita la formación de un gobierno "que quiere romper España".

Ciudadanos trabaja desde hace algunos meses en la redacción de una propuesta de reforma constitucional que sirva para atraer a los votantes moderados de los partidos soberanistas. Esa será, aseguran, su principal baza para intentar arañar votos.

Un grupo de expertos trabaja en una serie de medidas en todos los aspectos; financiación autonómica, independencia del poder judicial, reducción de la administración, blindaje de competencias... Para los de Rivera la candidatura soberanista adolece de un defecto fundamental en política. "Y es que hacen una propuesta radical y que tiene resultados inciertos y posiblemente desventajosos para la ciudadanía". "No plantea un proyecto de verdad en cuanto a sanidad, educación o servicios sociales", dicen.