Luis Suárez coloca al Barça junto al Real Madrid

El Barça sigue transitando por el camino gris y nublado por el que camina desde las lesiones de Leo Messi e Iniesta. Sin mucho fútbol y con muchos problemas defensivos, el equipo de Luis Enrique tira de la calidad de sus atacantes para seguir sacando puntos. La fórmula, al menos de momento, funciona, y ya es colíder de Primera junto al Real Madrid.

Si ante el Rayo Vallecano fue Neymar, ante el Eibar fue Luis Suárez. El ariete uruguayo celebraba su cumpleaños, hace un año debutaba con el Barça después de su sanción por el mordisco a Chielini. El ‘9’ culé lideró la victoria de su equipo gracias a sus tres tantos, que sirvieron para remontar el tanto inicial de Bastón.

El gol del delantero del Eibar llegó como consecuencia del buen hacer del equipo de Mendilibar. El conjunto vasco marcha en la parte alta de la clasificación y no es por casualidad. Con las ideas muy claras y con jugadores en racha, como el propio Bastón, el Eibar es una delicia para el fútbol español. No solamente por su ejemplo fuera de los terrenos de juego, defendiendo una economía saneada y primando el buen hacer que el dispendio, algo tan habitual en estos años en el mundo del balompié.

El Eibar apuesta por fútbol basado en la presión constante. Al Barça le complicó la salida de balón, presionando a Mascherano, que jugaba en el puesto de Busquets, y al propio Busquets, que hizo de Iniesta. En una de esas presiones Bartra falló y Verdi encontró con un gran pase a Keko, que ante Bravo no supo definir. Para fortuna del equipo vasco el balón cayó en las botas de Bastón, que no faltó a su cita con el gol y adelantó al Eibar en el Camp Nou.

El gol llenó de dudas al Barça, huérfano de un faro en el camino hacia las posiciones de ataque, sin Iniesta, sin Sergi Roberto o sin Rafinha, Rakitic no conseguía imponerse en el centro del campo.

A pesar de ello, en el minuto 21 apareció Neymar, el factor diferencial. El brasileño dribló a varios jugadores y le dejó el balón a Busquets, que levantó la cabeza y le regaló un balón perfecto a Sandro, que de primera centró al área pequeña para que Suárez entrase como un misil para empatar el partido. El gol no debería haber subido al marcador porque Sandro estaba en fuera de juego.

Antes del descanso el Eibar pudo volver a liderar el marcador, pero Keko se encontró con las piernas de Bartra, que salvó el tanto eibarrés en la línea de gol.

En la segunda parte el Eibar empezó con las mismas ganas pero a los pocos minutos sufrió, de nuevo, el castigo de Luis Suárez. Una vez más funcionó la sociedad Neymar – Suárez. El brasileño habilitó al uruguayo, que desde el punto de penalti no falló y resolvió. Gol, remontada y liderato compartido.

El punto y final llegó otra vez, cómo no, con otro gol de Suárez. El uruguayo celebró su cumpleaños como jugador culé firmando un triplete justo después de la expulsión de Mascherano.

El Eibar se marchó del Camp Nou con la cabeza alta y con la sensación de que solo un gol en fuera de juego y la calidad de jugadores top como Neymar o Suárez evitaron que puntuase en uno de los estadios más duros de España. Mientras, el Barça sigue tachando días para el regreso de Iniesta y de Messi, los iluminadores de un Barça, que en su ausencia, es un equipo gris.