El Ondas silencioso de Pablo
Creó 'El Ministerio del Tiempo' junto a su hermano Javier. Fue la última genialidad de un guionista de raza
Madrid
"Mi hermano pudo llegar a ver el primer capítulo montado, sin efectos ni sonido… Lo que se llama pre-master. Siguió escribiendo el segundo. Escribió también el quinto, el de Gernika… Pero ya era muy duro. Escribía media escena y me pedía que siguiera yo porque él ya no podía. Yo he escrito llorando esta serie". A Javier Olivares, tan vehemente y sarcástico en otras ocasiones, le tiembla la voz cuando habla de su hermano Pablo y de cómo ellos dos crearon y escribieron 'El Ministerio del Tiempo', ficción ganadora del Ondas como Mejor Serie Española. "Él escribía con ratón ocular, pestañeando letra a letra. No podía documentar, así que le documentaba yo; los capítulos le quedaban cortos y yo los tenía que completar… Pero escribía genialidades… Mi hermano siempre era muy pudoroso a la hora de mostrar emociones, me decía que yo era el moñas; pero cuando ya estaba enfermo, contó su vida entera en 'El Ministerio del Tiempo'".
Pablo Olivares murió hace un año víctima de ELA, una enfermedad que lo consumía desde hacía cuatro. Es prácticamente imposible encontrar entre el gremio de guionistas de televisión a alguno que no coincida en que Pablo era pura genialidad al servicio del guion. Quien, además, lo conocía de una manera más personal, podrá destacar otras virtudes.
"Pablo era un grandísimo conversador. Más allá del guionismo, era una delicia estar con Pablo porque era un conversador tan salvajemente enriquecedor para el que estaba al lado que era igual de lo que hablara. Tenía un gran criterio. Cuando encuentras a una gente así, se vuelven imprescindibles en tu vida". A Álex Pina le cuesta referirse a Pablo Olivares en pasado. Durante toda la charla mezcla el pretérito y el presente para hablar del que durante muchos años fue, más que un compañero de trabajo, un amigo.
"Conozco a Pablo de hace mil años… intentábamos ganarnos la vida de guionistas, pero nos la teníamos que ganar de otras formas. Conocí mucho a Pablo en un momento en el que intentábamos llegar a algún sitio escribiendo y no era nada fácil lograrlo", explica Álex. Quiere la casualidad que Álex sea uno de los padres de la otra serie triunfadora en esta edición de los Premios Ondas, 'Vis a vis'.
Un Ondas de dignidad en el silencio
Pablo Olivares escribió 'El Ministerio del Tiempo' sin poder hablar, ayudándose de la tecnología para poder volcar lo que nacía en su mente genial. Y así, en silencio, cree Javier que celebraría Pablo este Premio Ondas: "Si Pablo y yo viviéramos esto juntos, estaríamos muy callados. Pablo y yo teníamos muchos silencios de satisfacción. Mirándonos e intentando creernos que por fin se había reconocido nuestro esfuerzo de creer que la ficción puede ser otra cosa".
Así lo interpreta también Álex Pina, quien ve en este reconocimiento algo más que un premio a una buena serie: "Este Ondas es un premio al guionismo de raza y al, le pese a quien le pese, voy a seguir las indicaciones de mi criterio. Creo que Pablo valoraría este Ondas por ser un premio a la autenticidad de luchar contra viento y marea para hacer los proyectos según aquello en lo que siempre han creído".
Echando la vista atrás, Álex recuerda cómo la ilusión y la decepción se mezclaban en los comienzos de estos tres guionistas: "Hemos preparado mil historias, mil series, mil programas de todo tipo. Quedábamos los viernes, los sábados… A cualquier hora: el tema era generar proyectos de todo tipo e intentar venderlos", comenta un Álex Pina que reconoce que, en aquella época, con menos de 30 años e intentando hacerse un hueco en el oficio, las cosas casi nunca pintaban bien: "Hay un momento en el que piensas: somos una banda de mataos, no vamos a llegar a ninguna parte", comenta Álex.
Este es el segundo Premio Ondas que se lleva una serie creada por los hermanos Olivares. Lo ganaron también con 'Isabel', serie que permanecía atascada en los despachos de TVE, que cambió de productora y que dentro de la misma productora cambió de guionistas hasta que fue a parar a las manos de Javier. "Estando yo en Barcelona, me dice que le han diagnosticado ELA. Era octubre de 2010. Yo me vengo abajo y me voy al despacho de Jaume Banacolocha (productor de Diagonal) y le pido que me dé algún proyecto. En ese momento tenían estancado el proyecto de 'Isabel'. Yo me llevé el dossier a casa durante un puente y creé un dossier totalmente nuevo. Cuando acabó el puente, lo entregué en Diagonal y Diagonal lo presentó a TVE que, entonces sí, aceptó esta nueva 'Isabel'.", recuerda Olivares. "Pablo ha escrito en 'Isabel' y en 'El Ministerio del Tiempo' los mejores guiones de su vida".
"Pablo y yo lloramos mucho con el Ondas de 'Isabel'. Llorábamos de alegría". Comenta un Javier Olivares que también lamenta que en aquella ocasión, si bien pudo subir al escenario con actores y productores a recogerlo, no fue de los que tuvieron oportunidad de acercarse al micro para agradecer el galardón.
No ocurrirá así con 'El Ministerio del Tiempo'. No estará su hermano Pablo, pero sí la hija de este: "Quiero que disfrute del gran premio que ha conseguido la idea de su padre". Para Javier, la serie "es el resultado de muchos años de lucha, de dignificar nuestro oficio, de plantarnos mil veces, de alguien que se planta por dignidad aún sabiendo que eso le impedirá verla emitida en televisión…"
'El Ministerio del Tiempo' nació en un bar
"Cuando le dije a Pablo que TVE había comprado la serie, tenía problemas de respiración, pero le dio un ataque de risa que casi se ahoga. Fue delirante. Decía por ordenador: están locos, no saben dónde se han metido. Pablo me miraba como diciendo: no es posible que la hayamos colocado", cuenta Javier sobre el momento en el que dio la noticia a su hermano.
La serie posee una concepción tan arriesgada y se sale tanto de los parámetros normales en los que se mueve la ficción televisiva española en cadenas generalistas que cualquier experto hubiera invitado a los hermanos Olivares a guardar ese dossier en el que detallaban la idea de 'El Ministerio del Tiempo'. Pero Pablo quería intentarlo, así que mandó a su hermano Javier a aporrear puertas e intentar vender una loca idea nacida una década antes: "Viene de hace 13 o 14 años. Yo estaba dando clase en el Instituto Europeo de Diseño y él estaba como guionista de programas. Como ya no escribíamos juntos, quedamos para tomar una cerveza. Pablo insistía en que volviéramos a hacer algo juntos. Y pensamos en hacer algo que nos gustase, aunque no nos lo compraran". Entre caña y caña, cuenta Javier que la mente de Pablo se puso a trabajar: "De inmediato dijo: una de viajes por el tiempo, pero en un ministerio… para que se junte lo fantástico con lo cotidiano. Así se le ocurrió. Estuvimos media hora más, apuntó cositas en un cuadernito que llevaba siempre y no volvimos a hablar más. Siempre decíamos que teníamos que hacer lo de 'El Ministerio', pero…". Y lo de 'El Ministerio' ahí permanecía guardado, como ese proyecto de futuro con pocas probabilidades de ver la luz. Una sensación que conoce bien cualquier guionista de raza, la de escribir algo que se aparte de las exigencias del mercado y solo porque realmente le satisface.
La enfermedad y la salida de los dos hermanos de la productora Diagonal tras ser los creadores de la primera y elogiada temporada de 'Isabel' llevó a Pablo a insistir en la idea de 'El Ministerio del Tiempo': "Él escribe el capítulo 1 de 'El Ministerio'. Yo edito y cambio alguna cosita. Pablo hizo un dossier de venta que era un dossier falso de El País Semanal [ver foto abajo]. Yo hago el otro dossier que faltaba y lo entrego a TVE en una de las reuniones que yo tenía para abordar cosas de 'Víctor Ros'. A las 3 semanas, Fernando López Puig me dice que quiere hacer 'El Ministerio del Tiempo'. Todo se lo debemos a él, que apostó por los Olivares como no ha apostado nadie. Le gustó mucho el concepto por ser algo fantástico y al mismo tiempo muy cotidiano, muy español y, aunque había comedia, muy emotivo", cuenta Javier que se muestra totalmente agradecido a TVE y Fernando López Puig, director de Ficción de la cadena.
El complicado parto de 'El Ministerio del tiempo'
Pero la vida de estos dos guionistas de Usera no se escribe acorde con un guion de película sensiblera de Hollywood. Tras el sí de TVE llegó una desagradable sorpresa que puso en peligro el nacimiento del proyecto de esta serie: "Una vez logramos vender el capítulo 1, empezamos a escribir el dos y el tres. Ahí empezó la segunda gran batalla: conseguir una productora. Logramos el visto bueno de TVE con una productora -que prefiero no nombrar-. Llegamos a un acuerdo de co-producción con ella en el que el control creativo de la producción era nuestro. Es decir, funcionar como showrunners. Pero el día de firmar el contrato se echan atrás".
Ese momento fue crucial. Javier no podía obviar la cuenta atrás a la que estaba atado su hermano y la posibilidad de que Pablo no llegara a ver estrenada 'El Ministerio del Tiempo'. Sin saber muy bien si rechazar esta nueva propuesta de la productora o acatar los nuevos términos, Javier consultó a su hermano: "Le escribo a Pablo -ya no podía hablar- y me dice que no firmemos. Fue uno de los momentos más jodidos de mi vida porque le dije: si nos negamos a estas condiciones, probablemente no llegues a ver la serie emitida. Y me volvió a decir que no, que esta serie se hacía bien o no se hacía", cuenta Javier.
TVE entendió la situación y esperó a que los hermanos Olivares encontrasen una productora que aceptara eso de no interferir en los aspectos creativos de la ficción y que se limitase a cuestiones logísticas, financieras… acordando qué porcentaje de beneficios se llevaba cada miembro de esta co-producción. Tras recibir la negativa de tres grandes productoras (que Javier tampoco ha querido mencionar para este reportaje), dio con José María Irisarri, de Onza Partners, que sí entendió el concepto y se unió a Cliffhanger (productora de Olivares) en la aventura de dar a luz a 'El Ministerio del Tiempo'.
Pablo Olivares murió el 20 de noviembre de 2014. "Después de escribir el quinto capítulo, ya no podía más. Estábamos rodando el tercero y ya no podía comunicarse. Lo que le mantenía vivo era poder hablar a través del ordenador con su hija, conmigo, poder crear… Cuando ya no tuvo eso, se dejó llevar. A mí no me dejó estar cuando se fue. Es algo que llevaré mal toda mi vida. Me dijo que me fuera a rodar. Cuando él murió, yo estaba en Uclés, rodando", explica un abatido Javier que posee el consuelo de que su hermano, al menos, pudiera ver montado (sin efectos) el capítulo piloto. "Cuando Pablo muere, yo no quise hablar con nadie. Sin embargo, el día del estreno de 'El Ministerio' me senté y escribí una carta muy larga a su mujer. Escribí todo lo que no había dicho antes", relata Álex que, con pena, recuerda la última conversación telefónica con Pablo: "Ya no le entendía lo que decía. Ha sido muy sobrecogedor. Entre la vinculación emocional que tú tienes y lo perra que es esa enfermedad… cuando vi el primer capítulo se produjo en mí un impacto muy fuerte. Es como si ese espacio de tiempo entre que Pablo muere y se estrena 'El Ministerio' fuera necesario para mí".
'El Ministerio del Tiempo' se estrenó en La 1 el 24 de febrero y, un mes después, TVE la renovaba por una segunda temporada. La serie ha recibido multitud de premios y el casi unánime elogio de la crítica especializada.
Los otros ministerios y un abrazo de despedida
"Todo lo grande que escribimos juntos no ha visto la luz. Tenemos joyas del nivel de 'El Ministerio del Tiempo', por lo menos, media docena. Están en un cajón casi, algunas con casi 20 años", afirma Javier.
Entre esas joyas una produjo una especial amargura en los Olivares por ver cómo debía morir sin ver la luz: 'La leyenda del tiempo'. "Pablo me habló de una serie maravillosa llamada 'Life on Mars'. Hablamos Diagonal y con la BBC. Todo, perfecto. Y a los dos días nos enteramos de que ya había comprado los derechos Antena 3. Así que vamos a Antena 3 y les presentamos nuestro proyecto. Esto sería en 2008. Ellos prefieren apostar por la propuesta de otros para esta adaptación".
Aquella otra propuesta sería lo que luego vio la luz como 'La chica de ayer', una serie que se estrelló en audiencia sin recibir tampoco el respaldo de la crítica. "Recuerdo que fue tan duro el golpe que Pablo me llamó para decirme: llama a Jaume [Banacolocha, de Diagonal] que está jodidísimo en el hotel. Fue la primera vez que vi a un productor desmoralizado", cuenta Javier explicando que su proyecto "era un homenaje a las películas de Eloy de la Iglesia, ese momento en el que la Policía cambia sus uniformes del gris al madero, a Camarón".
Una cartera de proyectos geniales que murieron sin ver la luz: "Es jodida y triste la historia; que sea con Pablo ya enfermo cuando empezamos a ser los guionistas de verdad -tipo BBC- que siempre habíamos querido ser. Pero él ya tenía su fecha de condena a muerte", lamenta Javier que resume la trayectoria como guionistas de los dos hermanos como "una historia de lucha, de muchos fracasos".
"Pablo era capaz de interpretar la vida a través de metáforas de fútbol. O con frases de Luis Aragonés", cuenta Álex. Y como si de una metáfora más de aquellas que usaba Pablo se tratase, Javier aprovecho las puertas su ministerio para dar el abrazo de despedida que en vida no fue posible: "Mi capítulo de Lorca es mi despedida y homenaje a Pablo. El abrazo de Julián con Lorca es mi abrazo a Pablo".
- El tercer Olivares