Adiós a Andrés Lewin, el cantante que hablaba de amor en masculino

Madrid

Andrés Lewin estaba terminando su último disco. Iba a presentar La tristeza de la Vía Láctea el próximo 16 de marzo en Galileo Galilei, una de las salas madrileñas que tantas noches fue su casa. La fecha y el lugar se mantienen. Ese día sonarán sus canciones pero Andrés no estará. Su voz se apagó la víspera de Reyes. Sus amigos, a los que consideraba su familia, rendirán homenaje al cantante con un concierto muy especial.

Luis Ramiro es uno de esos amigos con el que mantenía una relación fraternal, uno de los que más ha sentido su pérdida: “Ha sido muy trágico y aún estamos todos en shock tratando de asimilarlo. Fue la persona más especial que he conocido en esta vida y le llevaré siempre conmigo. He querido tanto a muy pocas personas en esta vida, y él era uno de ellos”, se puede leer en su Facebook.

Andrés era, efectivamente, una persona muy especial. Veía el mundo desde una perspectiva única y lo reflejaba en sus canciones, alegres, pesimistas, espontáneas, reflexivas. En más de una ocasión, contaba las piedras que había encontrado en el camino por ser homosexual pero nunca ocultó lo que sentía. En sus canciones de amor, hablaba en masculino. No tenía ningún problema en hablar de cuestiones personales, como la muerte prematura de su madre. Ahora, descansa junto a ella en el cementerio judío de Hoyo de Manzanares, en Madrid.