¿Qué propone cada partido contra la reforma laboral del PP?
Todos los partidos políticos -menos el PP por motivos obvios- han planteado cambios en la reforma laboral de Rajoy. Estos cambios están ya sobre la mesa negociadora del nuevo gobierno
Madrid
El PSOE plantea dos fases para cambiar la legislación laboral. Con carácter urgente, deroga todo lo relacionado con la negociación colectiva, de forma que mantiene la ultraactividad de los convenios durante el periodo de negociación y elimina el procedimiento que permite al empresario, de forma unilateral, la modificación de las condiciones de trabajo. También detalla algo que estaba planteado de forma más difusa en el programa electoral, que es la recuperación de la causalidad del despido colectivo. Restablecen también los socialistas el informe preceptivo de la Inspección de Trabajo en los despidos colectivos y reduce a tres modalidades el contrato de trabajo.
Dejan para una segunda fase, ya en la negociación con los agentes sociales de un nuevo Estatuto de los Trabajadores, todo lo relacionado con la regulación del despido. No hay referencia en el documento a que se vaya a volver a las condiciones previas a la reforma del PP.
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La propuesta estrella de Ciudadanos es el contrato único, su receta para acabar con la temporalidad y la precariedad. Éstos son para ellos los dos grandes problemas del sistema actual. Los de Rivera no son partidarios de derogar la reforma laboral del PP al completo, sólo retocar algunos aspectos. Apuestan por establecer una indemnización por despido progresiva según la antigüedad de hasta un máximo de 33 días por año. Sí apuestan por abaratar la contratación y establecer un complemento salarial a las rentas más bajas.
Por su parte, Podemos es partidario de derogar las dos últimas reformas laborales, tanto la del PP como la del PSOE. La formación morada apuesta por subir progresivamente el Salario Mínimo Interprofesional, de los 648,60 euros actuales hasta los 800 euros en 2018. Y, por otro lado, contempla una paga complementaria de hasta 900 para los trabajadores que pese a contar con un empleo tienen un sueldo tan bajo que también pueden considerarse «pobres». En concreto, según recuerda Podemos, los datos de la EPA y del INE cifran en un 30% los asalariados españoles que cobran actualmente 950 euros brutos o menos al mes.
El partido de Pablo Iglesias recogía en su programa electoral la recuperación de la figura del despido nulo por fraude de ley y la reforma del el despido por causas económicas, productivas, técnicas y organizativas.
En la misma línea, IU plantea derogar las dos últimas reformas laborales, la del PP y la del PSOE, recuperando la indemnización por despido de 45 días y los salarios de tramitación. La coalición quiere también prohibir los despidos colectivos en el sector público y que no haya ERE en empresas con beneficios. Igualmente propone remunicipalizar los servicios privatizados reincorporando a los trabajadores con sus mismos derechos y salarios, así como prohibir las ETT e instaurar la semana laboral de 35 horas. En materia salarial, quiere que nadie en una empresa pueda cobrar más de 10 veces que el empleado peor retribuido y pide reformar la inspección de trabajo aplicando el delito de desobediencia a la autoridad a aquellos empleados que incumplan sus resoluciones.