La romántica locura de David Trueba
Entrevista con David Trueba y Jorge Sanz, director y protagonista de '¿Qué fue de Jorge Sanz?'
Madrid
Jorge Sanz desaprueba lo que está escuchando. Debe pensar que su amigo no es consciente de lo que está afirmando delante de la grabadora. Que ha perdido la chaveta, que se ha vuelto loco o la ingenuidad se ha apoderado de él… o que está vacilando al periodista. Y es que David Trueba no ve imposible que las grandes televisiones comerciales que emiten en abierto en España se lancen a desarrollar un producto como su serie. David Trueba cree factible que cadenas como Antena 3 o Telecinco parieran y emitiesen algo así como '¿Qué fue de Jorge Sanz?'.
Jorge Sanz: "Esto es una serie imposible de hacer en Antena 3, Telecinco o cualquier otro canal así…"
David Trueba: "Pues yo empujo a Antena 3 y Telecinco a que las hagan. No digo que la metan a las 10 de la noche en el prime time normal, pero sí que la hagan para el domingo por la noche después de…"
Periodista: ¿Y crees que te la dejarían hacer así, como la has hecho con CANAL+ [ahora Movistar+]?
David Trueba: "Yo espero que sí. Está claro que no hacen; ni ésta ni alguna similar. No entiendo por qué, no todo tiene que ser popular en una televisión. Tiene que haber cosas que generen marca y prestigio a esa marca. Si tú a una serie tan popular como 'Velvet' o 'El Príncipe', a otra hora más a destiempo le sumas otra serie de la que la gente diga que es muy rara, pero que está bien… No pasa nada, contribuye y es dar una variedad. Como directivo de esos canales, les diría que tienen que hacer una o dos piececitas así, con mucho cariño"
Jorge Sanz: "Yo soy más realista. Yo creo que no. Cuando propones una serie te exigen que haya una sirvienta andaluza, que haya conflicto entre los hijos de la pareja, que todos sean guapísimos…"
La conversación no va a más porque la responsable de prensa avisa de que ya han pasado un par de minutos del tiempo acordado para esta entrevista. Quizá convenga situar al lector. ¿Qué serie es de la que hablan Jorge Sanz y David Trueba? ¿Qué es eso de '¿Qué fue de Jorge Sanz?'?
Se trata de una miniserie que Canal+ emitió en 2010 y que invita a pensar que David Trueba es un loco romántico del audiovisual español. Una serie en la que puso a Jorge Sanz -galán juvenil en el cine de los ochenta- a interpretarse a sí mismo y en la que le creó un personaje protagonista que contenía todo aquello a lo que un actor ha de enfrentarse cuando pierde el favor del foco y de la fama. "Eso es el pacto que nació de salida. Esta serie se inventa para Jorge, por Jorge y en ese momento de Jorge. Lo que pretende es ser una especie de catalizador de muchas cosas que estaban alrededor de su oficio y convertirlas en elementos de fuerza y no de lastre. En un elemento propulsor. Vamos a coger todos esos elementos que aparentan ser problemas y vamos a transformarlos en virtudes. Con eso vamos a intentar divertirnos, divertir a los demás y hablar sincero de muchas cosas del oficio que quedan fuera del la imagen estereotipada que la gente tiene de la alfombra roja", explica Trueba.
Periodista: ¿Cómo Jorge Sanz se anima a hacer algo así?
Jorge Sanz: "Porque nuestro oficio consiste en eso, en reinventarse y en sorprender a la gente ofreciéndole cosas nuevas. A nivel personal, es mucho más gratificante. Te estás rebajando a hacer un actor en paro, al que todo le va mal, no se hace con su hijo… En realidad yo estoy trabajando en una serie para Canal+, estoy haciendo mi trabajo, vivo con mis hijos…"
David Trueba: "La serie es una conversación con el público: esto somos, este eres tú"
Y así nació '¿Qué fue de Jorge Sanz?', miniserie de seis capítulos que resultaron ser una comedia delicada y deliciosa sobre la trastienda del mundo de la farándula visto a través de los ojos de un actor que conoció tiempos mejores.
Un producto muy artesanal, que no gustará a todos los públicos, sin florituras en lo visual y con una importancia capital de los diálogos y del silencio. Sobra decir, por tanto, que ninguna cadena se ha animado a comprar sus derechos y emitirla en abierto en estos más de cinco años que se han cumplido desde que se estrenó. "Yo había jurado que no quería hacer segunda temporada, pero haría un episodio cada cuatro o cinco años. Al llegar al cuarto año, hablé con Jorge, sumamos cosas que Jorge me contó, nuevo material…", explica Trueba.
Dicho y hecho. El cineasta se puso en contacto con la cadena, les explicó que quería hacer un séptimo episodio, que sería más largo que los seis anteriores (de hora y media) y que se centraría en el intento de Jorge Sanz de recuperar su popularidad merced a una obrita de teatro junto a Elena Furiase, co-protagonista de este episodio siete. "No nos creíamos que ibas a cumplir tu palabra", cuenta Trueba que le dijeron desde Canal+ a principios de 2015, cuando les llamó para retomar el proyecto. "Lo único que pedí es que las condiciones fueran iguales, total libertad". Este sábado 13 de febrero se estrena el nuevo episodio de '¿Qué fue de Jorge Sanz?' (Canal+ Series Extra 22:30 horas)
Para Jorge Sanz esta serie es una delicia. Apunta que le llegó justo en el momento idóneo y que fue muy pesado para que David Trueba se lanzara a la piscina. Incluso explica que llegó a rechazar algún que otro proyecto por sacar adelante esta miniserie. "Estaba en el momento perfecto para hacer esta serie. A partir de ahí, David ha sido el que ha marcado la pauta", comenta.
Una serie con ritmos de cine
Se habla de serie cuando en realidad se está presentando un único capítulo especial. Es la peculiaridad de este proyecto que, cada cuatro o cinco años -quizá menos, quizá más-, el público irá descubriendo un nuevo capítulo de la serie.
No puede evitar David Trueba llevar su obra a su terreno, al del cine. Los protagonistas aseguran que el rodaje no ha sido, en absoluto, comparable al de cualquier serie de televisión en España. Han sentido que estaban rodando una película."Sí, es una serie delicada que necesitas más bien generar el estado de ánimo, más que pedir cosas imposibles. Se trabaja tranquilos. El ritmo es cinematográfico, pero también el cine en España se hace mucho más deprisa. Yo fui a ver con mi hijo un rodaje de Alfonso Quaron y le pregunté: ¿cuántas semanas tienes para rodar?; me dijo: ¿semanas? ¡Seis meses!. Yo hice 'Vivir es fácil' en cinco semanas, con lo que para mí el ritmo cinematográfico es muy rápido. Pero con mucho cariño y mucho cuidado", explica David Trueba quien, por si las moscas, asegura: "No soy un director caro, ya te lo digo".
Para Sanz, la clave está en cómo se hacen las cosas en este proyecto más que en si se trata de ritmos de tele, cine o dinero: "Desde el principio, pensamos que hay mucha parafernalia, sobre todo, en la tele. Nosotros no íbamos a usar esa parafernalia: era quedar tal día para rodar esto".
En esa particular y artesanal manera de trabajar que tiene Trueba está la de mirar a través de una única lente y de conversar con sus actores: "Con una sola cámara estoy pendiente solo de esa cámara, no tengo que estar a tres. Así puedo hablar con el actor y decirle lo que pienso. Lo hacemos y creo que hasta gano tiempo. Jorge y los demás actores tienen para mí mucha importancia. Hablamos con ellos y ellos saben lo que quiero y proponen muchas cosas. Tienen unos diálogos claros, pero también la puerta abierta para proponer. Esto son mecanismos de relojería, no es fácil cambiar una pieza; pero sí pequeños elementos", explica.
El actor, la vida y los peligros de la televisión
Uno de los juegos que mantiene la serie con el espectador es dejarle imaginar hasta qué punto es cierto o falso lo que le pasa al Jorge Sanz de la comedia, qué está basado en experiencias reales y qué es puro añadido para condimentar el guion. "La realidad supera siempre a la ficción", bromea Sanz.
Lo que también permite entrever esta obra es la enorme evolución del universo del actor, del oficio y del sector. "Yo soy de los últimos representantes de un oficio que se hacía antes y que era artesanía. Éramos unos actores que éramos una familia. ¿quién hace de niño? Pues Jorge, ¿y quién de San Pablo? Pues Agustín González, ¿y de zoquete? Pues Gabino… Ese es un cine que había antes y que ya no existe", asegura Jorge Sanz.
Periodista: ¿Por qué no existe?
David Trueba: "Ha cambiado mucho el mundo del espectáculo también por la percepción que tienen los medios de comunicación de las vidas de los artistas. Ahora, uno prolonga su carrera las 24 horas del día, teniendo que estar siempre al servicio del público, con una especie de vida privada exhibida: enseñas lo que estás cenando, pero otras cosas no las quieres contar… Con este mundo de las redes sociales, todos están enseñando su cara buena; y los medios, por morbo, están interesados en descubrir su cara mala. El actor ve que lo que está viviendo es una auténtica olla a presión donde no hay familiaridad"
Jorge Sanz: "Ahora este oficio es muchísimo más grande que antes"
David Trueba: "También el éxito es más grande; entonces, también hay más ambiciones, más competencia…".
Cambio. Diferencias. Ni mejor, ni peor. El director entiende que ahora, como antaño, la fama asociada al oficio del actor trae aparejada elementos positivos y negativos con los que cada cual ha de saber lidiar y que, en buena medida, determinarán su crecimiento profesional: "El actor, cuando se hace bueno es cuando tiene vida dentro. Entonces, la ausencia de vida dentro de muchos actores se ve que son exprimidos muy rápidos. Para encontrar un Fernán Gómez o un Paco Rabal se necesita que hayan vivido mucho. Esa vida está más allá del trabajo que hayas hecho".
En este punto, la pequeña pantalla encierra ciertos peligros, especialmente, para los más jóvenes de la profesión pues es una puerta semanal que conecta con cientos de miles de hogares. "La televisión tiene sus peligros, va muy rápida e intenta generar arquetipo de una manera muy superficial", opina Trueba.
Trueba y Sanz consideran que para el actor es importante no encerrarse en un círculo de iguales, pues su talento bebe de lo que vive. Sanz habla de la escuela de vida de Paco Rabal, capaz de compadrear con el productor más importante de Madrid o de brindar durante horas en un castizo bar con un desconocido cuyas historias le generasen el suficiente interés.
Hoy, entre las nuevas generaciones de actores, no es tan fácil ver esto, existe cierta endogamia en su manera de relacionarse: "Se protegen. Pero creo que es un poco excesivo. Deberían prestar más atención a cómo la vida les invade su trabajo, sin tenerle miedo. Creo que es malo que las profesiones se relacionen solo entre las profesiones. La gente tiene que mezclarse, intentar interesarse en otros oficios".
Solo queda tiempo para un par de fotos delante del cartel promocional de este episodio especial de '¿Qué fue de Jorge Sanz?'. Bromean con el eslogan, coleguéan abrazados para la foto. La entrevista ha sido más bien un borbotón de opiniones de uno y otro delante de la grabadora. Diálogo ágil, atropellado y poca presencia del entrevistador. A veces es mejor así. Casi siempre.
Al menos, esta vez el periodista no ha confundido a Jorge Sanz con su primo el cantante Alejandro ni a David Trueba le ha pedido que le relate su currículum una vez empezada la entrevista. Dos experiencias que han vivido de verdad y que, de verlo, en la serie, cualquier espectador pensaría que es pura exageración ficcionada. Por más que nos neguemos a creerlo, la realidad siempre supera a la ficción.