El ataque de Rita Barberá a Maroto y Maillo indigna a Génova

Madrid

En la sede nacional del PP no dan crédito. Rita Barberá ha criticado a dos de sus vicesecretarios. Por un lado, ataca al de Organización, Fernando Martínez Maillo, por contar en la Cadena SER que la exalcaldesa de Valencia declaró el pasado 3 de mayo ante el instructor que lleva su expediente informativo. A ella le parece que es “una irresponsabilidad” desvelarlo. Por otro, arremete contra el responsable de Acción Sectorial, Javier Maroto, a quien acusa de no preocuparse por su condena en el caso San Antonio porque cuando esta se hizo pública, él estaba en Estocolmo para ver Eurovisión.

En Génova sus palabras no han caído nada bien pero han optado por quitarle hierro al asunto de inmediato. “No vamos a avivar la polémica”, reconocen fuentes populares. Creen que lo mejor es no entrar a la guerra que se ha desatado. Una situación que estalló cuando, desde el núcleo duro del PP, algunos de sus dirigentes enarbolaron un discurso más contundente contra la corrupción mientras reclamaban a Barberá que diera la cara y explicaciones por el caso Taula.

En público, la dirección mantiene las formas. Hoy Pablo Casado, vicesecretario de Comunicación, defendía en Onda Cero a sus compañeros y, al tiempo, respondía que “no le daban ninguna importancia" a las palabras de Barberá. “Son gajes del oficio”, comentaba el vicesecretario de Comunicación indicando que esto es lo que ocurre cuando uno tiene que ejercer de portavoz y hay que responder a las preguntas de los medios.

En privado, la opinión es otra. Señalan que Barberá está “rabiosa” y que “ha perdido los papeles”. Les parece que se le nota mucho que es “una venganza”. “Se la tiene jurada a Maillo porque la incluyó en el procedimiento interno sin estar siquiera imputada y a Maroto porque se alegró mucho por ello”, comenta un diputado conservador. A muchos populares les parece que se ha pasado de frenada y que, sobre todo, con Maroto ha sido “especialmente ofensiva”.