Ciudadanos ratifica su apoyo a Rajoy en la peor semana para el PP

Madrid

La que acaba ha sido una semana 'horribilis' para el Partido Popular. A la negativa del Gobierno a someterse al control del Congreso, no explicando en el pleno de la Cámara el nombramiento de José Manuel Soria como director ejecutivo del Banco Mundial, se suma la imputación de Rita Barberá por un presunto delito de blanqueo de capitales y el silencio de Mariano Rajoy mientras la exalcaldesa de Valencia se niega a renunciar a su escaño en el Senado. No hemos escuchado al jefe del Ejecutivo afear el comportamiento de la histórica dirigente del PP. Sin embargo, lo ocurrido no ha hecho que Ciudadanos se replantee su voto a favor del candidato conservador si consigue el apoyo de otros grupos para ser reelegido presidente. El partido mantiene en reposo pero intacto el acuerdo firmado, a la espera de que el PSOE u otro grupo ceda para permitir su investidura.

En la formación naranja se niegan a reconocer que con su actitud hayan ayudado al PP. Eso a pesar de que el pasado martes sus votos ayudaran a que Luis de Guindos diese las explicaciones sobre la designación del exministro de Industria en el marco de la comisión de Economía del Congreso, y no ante el pleno como exigía toda la oposición, incluido Ciudadanos. Ese formato, más restringido y rebajado, permitió que el titular de Economía no tuviese que escuchar la réplica de los diputados del resto de formaciones que solo disponían de un turno de intervención y que no pudieron replicar las explicaciones al ministro. El partido justifica esta decisión asegurando que si hubiesen opuesto De Guindos no habría comparecido en ningún sitio y se arrogan el éxito de haberlo llevado a comparecer ante la Cámara. Albert Rivera llegó a acusar al PSOE y a Podemos de intentar evitar que el Ejecutivo diese explicaciones.

"No nos hemos creído las explicaciones del señor De Guindos, nos han parecido pobres", explica en declaraciones a la SER el secretario general del grupo parlamentario, Miguel Gutiérrez que justifica que aunque no comparta la posición del PP en ese asunto, el apoyo para la investidura no esté en peligro. "Se trata de un acuerdo para permitir que en este país haya un gobierno, ni Rita Barberá ni José Manuel Soria pueden condicionar eso, pero la formación de un Gobierno no puede garantizarse a cualquier precio". "Por eso exigimos que la exalcaldesa de Valencia deje su escaño como senadora y que alguien asuma responsabilidades por la candidatura del exministro de Industria". Aunque el partido lo exija, ninguna de esas dos cosas van a ocurrir. Rita Barberá se niega a abandonar su escaño y el equipo de Rajoy no tiene previsto asumir responsabilidades. A pesar de ello, Gutiérrez evita utilizar el pacto como medida de presión. "Un acuerdo político no puede ser utilizado como una herramienta de chantaje", zanja.

La formación naranja cree que con su actitud ha sido contundente y constructiva y defiende que ese el tipo de oposición que aspira a ejercer si finalmente se forma un gobierno. Rivera y los suyos se esfuerzan estos días en destacar lo que consideran la parte positiva de todo lo ocurrido. Que el Gobierno haya dado marcha atrás en el caso de Soria y que Barberá se haya dado de baja en el Partido Popular. Todo ello tiene un elemento en común, según defienden, y es que eso se ha conseguido gracias a Ciudadanos. Además, el partido ha utilizado su actitud para cargar contra el PSOE y Podemos. "Creo que Iglesias solo hace de comentarista de la actualidad política y Pedro Sánchez exactamente lo mismo, ni ayuda a que haya un Gobierno ni propone una alternativa". "Somos los únicos que estamos peleando porque esto se ponga en marcha", defiende Miguel Gutiérrez. "La manera de resolver este asunto es proponer reformas y llegar a acuerdos como el que ha hecho que Barberá no sea miembro del Partido Popular".