Xiaomi no autorizó a Zetta a modificar ni comercializar sus móviles

Madrid

Mediante un comunicado emitido a través de su página web, Zetta Smartphones explicaba, tras el escándalo del supuesto fraude que aseguraba que sus teléfonos móviles eran teléfonos de la marca china Xiaomi, que compartía componentes electrónicos con empresas del sector asiático para el ensamblaje de sus teléfonos.

No obstante, el fabricante de móviles chino Xiaomi ha negado tener relación comercial alguna con Zetta Smartphone. La empresa no autorizó la venta ni la posterior manipulación de los aparatos, cuyo logotipo original fue tapado o eliminado por el logo de Zetta, una bellota mordisqueada.

Al mismo tiempo, Xiaomi ha asegurado que no tiene ningún acuerdo de comercialización de ningún tipo en Europa occidental. También ha querido afirmar que todavía no tienen fecha para expandirse al viejo continente, por lo que la llegada de Xiaomi a Europa tendrá que esperar.

Facua espera una sanción ejemplarizante

Tras conocerse la noticia, Facua ha pedido una sanción ejemplarizante y que la Fiscalía abra una investigación sobre el posible fraude de Zetta Smartphones.

Facua ha denunciado también que existen irregularidades en el software instalado en los equipos y evidencias de que ha sido adulterado con el objetivo de aparentar un origen distinto al real. Entre otras cosas, la empresa utiliza el sistema operativo de código abierto CyanogenMod (CM) de manera comercial en algunos de sus dispositivos, algo que está terminalmente prohibido.

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Los teléfonos móviles de Zetta Smartphones contaban también con aplicaciones de Google de fábrica, pese a no ser dispositivos certificados para usar los Google Play Services. Por lo tanto, es una nueva irregularidad de la empresa de Zafra.

Acciones legales contra Zetta

La compañía de telefonía móvil china Xiaomi está valorando si finalmente emprenderá medidas legales contra los responsables de Zetta Smartphones.

Mientras tanto, Facua ha decidió denunciar a la empresa este lunes en la Secretaría General de Arquitectura, Vivienda y Políticas de Consumo y el Instituto de Consumo de Extremadura, adscritos a la Consejería de Salud y Política Social.