El rey, ante su quinta ronda de consultas

Madrid

La situación es inédita. Nunca antes en democracia se ha visto algo semejante. Dos años como rey,  y hoy se dispone a iniciar su quinta ronda de consultas con los líderes de los partidos con representación parlamentaria. Y en sólo 10 meses ha visto de todo, hasta una negativa, cuando Rajoy declinó el encargo para formar gobierno que le hizo el Jefe del Estado. Y Zarzuela lo puso por escrito en un comunicado: "Don Mariano Rajoy Brey ha agradecido dicho ofrecimiento, que ha declinado".

Era febrero cuando el rey, tras la pertinente ronda de consultas, intentó desbloquear el proceso de investidura encargando la formación de gobierno al entonces líder del PSOE. Pedro Sánchez, le había mostrado su disponibilidad condicionada a encontrar apoyos y se comprometió a "intentar aglutinar una mayoría parlamentaria para impulsar un gobierno de progreso y reformista. Al final solo consiguió los votos de Ciudadanos y no fueron suficientes para sacar adelante la investidura que fracasó y tras una tercera ronda de consultas el rey constató que ningún candidato tenía apoyos y en consecuencia firmó el decreto de disolución de las Cortes y se anunciaron las segundas elecciones para el último domingo de junio. El resultado de las urnas reforzó al Partido Popular, que incrementó el número de escaños hasta conseguir 137.

Con el mismo ritual, de menor a mayor representación parlamentario los portavoces políticos fueron pasando por Zarzuela. 15 en total, con la ausencia de Bildu y Esquerra Republicana, que desde el principio no acuden a esta cita con el rey. Sólo una cosa cambiaba respecto a las anteriores rondas de consultas. Ahora era la popular Ana Pastor la que había sustituido al socialista Patxi López en el cometido de la interlocución con el rey en su nueva condición de presidenta del Congreso de la nueva legislatura. Tras concluir los contactos, a finales del mes de julio, el rey encargó la formación de gobierno a Rajoy y el presidente en funciones aceptó pese a que según señaló, "no tenía los apoyos para ello". Ese día no concretó si se sometería al debate de investidura, al que finalmente llegó y no superó. Tras la investidura fallida el rey en un comunicado explicó que no abría ronda de consultas "por el momento", y recordó lo que dijo en su mensaje de Navidad, en el que señaló que "la pluralidad política, expresada en las urnas, conlleva una forma de ejercer la política basada en el diálogo, la concertación y el compromiso, con la finalidad de tomar las mejores decisiones que resuelvan los problemas de los ciudadanos".

Y a punto ya de agotarse el tiempo que marca la constitución para la disolución de las Cortes el 30 de octubre, el rey se dispone a iniciar la que podría ser la última ronda de contactos con los portavoces de los grupos políticos. En esta ocasión todos los representantes de los partidos se concentran en dos días, lunes y martes de esta última semana de octubre, tras lo cual el Jefe del Estado, previsiblemente encargará la formación de gobierno al presidente en funciones, Mariano Rajoy o firmará el decreto para las terceras elecciones en diez meses.