Economia y negocios
Puentes festivos

La patronal vuelve a plantear el traslado de festivos a lunes o viernes

Los sindicatos ven problemas más urgentes

Numerosos paseantes y turistas pasean por las inmediaciones del Museo Guggenheim de Bilbao, aprovechando el puente de la Constitución. / Luis Tejido EFE

Madrid

La patronal no ha olvidado su antigua reivindicación de eliminar los puentes festivos. Insiste en que restan productividad y competitividad a las empresas y pide que se busque trasladarlos a lunes o viernes. Asegura que lejos de restar ingresos a los sectores turístico y hostelero, la seguridad de libranza laboral en esas fechas haría aumentar los viajes y tendría un efecto multiplicador. Pero los sindicatos se muestran fríos. Dicen que hay problemas más urgentes y remiten un posible diálogo sobre el tema al marco de la negociación colectiva

Francisco Aranda, miembro de las directivas de la patronal madrileña CEIM y de la estatal CEOE remarca los efectos negativos que traen aparejados los puentes. "Paralizar o ralentizar en demasiado los procesos productivos y eso se transforma en pérdida de productividad por parte de las empresas", explica. Entre otras cosas, dice, porque se dispara el absentismo en esas fechas. El problema, reconoce, afecta en esencia a la industria y sus servicios complementarios, con un 35% del empleo total.

Los sectores de hostelería y turismo lo ven justo al revés: con el argumento de que los puentes les generan mucho negocio. Pero él sostiene que en un lunes o viernes festivo viaja más gente. "Cuando los días de fiesta están en lunes o viernes la generalidad de trabajadores sabe que se los puede coger y por tanto puede hacer planes a medio o largo plazo y a menudo se produce un efecto multiplicador de la generación de riqueza".

Los planes de 2012

Patronales y sindicatos, después de muchas dificultades para pactar fechas pidieron al gobierno en enero de 2011 que trasladase tres de los doce festivos nacionales.

A pesar de promesas iniciales el gobierno Rajoy dejó dormir el asunto. Hasta hoy. "Había problemas mucho más urgentes", apuntan ahora fuentes del ejecutivo.

"También los hay ahora", afirma Isabel Araque, de UGT: El traslado de los puentes "no es una prioridad para la UGT. Para nosotros -remarca- hay cuestiones verdaderamente serias y e importantes que atender en este país. Tanto a nivel social como empresarial. El paro, la pobreza, la sanidad o la educación. "Y podemos hablar del coste de la energía, o de la logística" que, desde su punto de vista, tienen una mayor incidencia en la productividad que los puentes.

Un punto de vista que comparte Ramón Górriz, de CC OO, sindicato que no parece interesado en retomar el asunto. No se niega a tratarlo con la patronal -tampoco la UGT- pero opina que el asunto se debe dejar en el marco de la negociación colectiva.

Opción individual

Entretanto los puentes -el enlace de fines de semana con festivos, como en la presente semana- suele ser una opción individual de los trabajadores, pactada dentro de cada empresa o departamento de la Administración.

El propio Ramón Górriz lo explica, por ejemplo, para la gran industria, que llega a echar el cierre algunos días al año. "En una planta puede haber tres semanas de cierre. A cada trabajador le quedan por ejemplo cinco o seis días de vacaciones, y de ellos son cierre colectivo tres en las Navidades, y los otros se los podrá gestar él individualmente".

Las fábricas de coches, por ejemplo, permiten algunas libranzas de este tipo, apunta María de Marco, de la patronal Anfac. "Las fábricas no cierran. Los trabajadores gestionan con sus empresas esos días libres de vacaciones con las empresas para que las fábricas sigan manteniendo su nivel de producción habitual y no haya ningún problema".

Y esa parece la fórmula más generalizable en otras empresas o en la administración, usando los trabajadores días de vacaciones o de asuntos propios.

 
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