Los yihadistas relanzan la ofensiva para recuperar la ciudad de Palmira
Los combates entre el Estado Islámico, rebeldes y tropas regulares se reactivan en diversos frentes en Siria
Beirut
El grupo terrorista Estado Islámico ha irrumpido en la ciudad monumental de Palmira más de ocho meses después de que fuera expulsado de ella por el Ejército sirio, mientras es hostigado en el norte del país por rebeldes apoyados por Turquía y las milicias kurdas.
Los yihadistas han avanzado por los alrededores del hospital de Palmira, en el extrarradio noroccidental de la urbe, después de controlar el distrito Al Ameriya, en el norte, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos. Además, se hicieron con el dominio del monte Al Tar, próximo a la ciudadela antigua de la localidad, ubicada en las afueras, que fue objetivo del lanzamiento de cohetes y los disparos de armas automáticas de los extremistas.
La Coordinadora de la Revolución en la Ciudad de Palmira, integrada por activistas, ha confirmado estas informaciones y ha señalado que los radicales tienen en su poder barrios del norte y el oeste de la población. No obstante, una fuente militar siria destacada en esa región ha dicho a la Agencia EFE por teléfono que "la batalla es intensa" y que se centra en los alrededores de Palmira, en concreto en la zona de los silos, al este de la ciudad.
Este jueves, el Estado Islámico lanzó una ofensiva en Palmira y otras partes del este de la provincia central de Homs, fronteriza con Irak, en la que se hicieron con el dominio de varias áreas.
El Observatorio ha añadido que un avión de guerra sirio se ha estrellado en los alrededores del yacimiento de petróleo de Yazal, en manos de los yihadistas y en el este de Homs, aunque por el momento se desconoce si se precipitó por un fallo técnico o si fue blanco de un ataque del Estado Islámico.
En mayo de 2015, el Estado Islámico llevó a cabo un amplio ataque en la mitad oriental de Homs, donde conquistó Palmira, cuyas ruinas grecorromanas son Patrimonio Mundial de la Unesco y que estuvo bajo el yugo de los radicales durante diez meses, hasta que las fuerzas armadas sirias recuperaron su control con el apoyo de la aviación rusa.
La irrupción de los extremistas en Palmira coincide con la intensificación de los ataques contra los feudos de los radicales en el norte de Siria. Rebeldes sirios apoyados por las fuerzas turcas han anunciado que han entrado en la ciudad de Al Bab, bastión principal del Estado Islámico en la provincia septentrional de Alepo.
En un comunicado, las fuerzas del opositor Ejército Libre Sirio (ELS) que participan en el ataque apuntaron que la operación para 'liberar' Al Bab comenzó a primera hora de la mañana y que tras nueve horas de batalla rompieron desde el norte la primera línea de defensa de los radicales dentro de la población. La nota destaca que al menos 40 integrantes del Estado Islámico han muerto y que dos de sus vehículos cargados con explosivos fueron destruidos.
Desde agosto, varias facciones sirias respaldadas por carros de combate y aviones turcos desarrollan la operación 'Escudo del Éufrates' en el norte de Alepo para expulsar al Estado Islámico y evitar el avance de las milicias kurdas. Entretanto, en la vecina provincia de Al Raqqa, la alianza armada kurdo-árabe, las Fuerzas de Siria Democrática (FDS), han declarado el inicio de la segunda fase de la ofensiva la 'Ira del Éufrates' para arrebatar a los yihadistas el control de la región.
Las Fuerzas de Siria Democrática han explicado en un comunicado que en la primera etapa, iniciada el 6 de noviembre, han arrebatado a los radicales 700 kilómetros cuadrados y decenas de pueblos, así como aldeas y caminos estratégicos, en el norte de Al Raqqa.
La segunda fase tendrá como objetivo "liberar completamente" áreas del oeste de la provincia y aislar su capital homónima, considerada la capital de facto del califato autoproclamado por el Estado Islámico en Siria e Irak en junio de 2014.
Con este fin, las Fuerzas de Siria Democrática han anunciado la adhesión de nuevos contingentes armados a esta ofensiva como el Consejo Militar de Deir al Zur, las fuerzas de élite de la Corriente del Mañana Siria y la Brigada de los Revolucionarios de Al Raqa.
También se han unido 1.500 combatientes árabes originarios de la ciudad de Al Raqa y de otras partes de la provincia. Esos guerrilleros han recibido entrenamiento y armas de la coalición internacional, liderada por Estados Unidos, dice el texto.
Las Fuerzas de Siria Democrática calificaron de "positiva" la coordinación con dicha coalición y auguraron que esta colaboración será más fuerte e influyente en la segunda etapa "hasta lograr la victoria completa contra el terrorismo".
Desde Baréin, el secretario de Defensa de EEUU, Ashton Carter, ha revelado que su país enviará unos 200 efectivos adicionales a Siria para apoyar a las milicias kurdo-árabes que combaten contra el EI en Al Raqa.