Afines a Susana Díaz buscan que no tenga rival en primarias
Dirigentes territoriales y veteranos quieren un gran acuerdo orgánico en torno a la presidenta de la Junta de Andalucía, integrando en su proyecto a figuras como Patxi López
La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz / Jose Manuel Vidal. (EFE)
Madrid
Unidad, pero en torno a la candidatura de Susana Díaz. En eso trabajan dirigentes territoriales y veteranos socialistas de cara al 39º Congreso del PSOE para el que, por el momento, no hay fecha, pero que previsiblemente se celebrará entre los meses de mayo y junio.
Entre los dirigentes afines a la gestora quieren confiar en que una vez que el comité federal, con toda probabilidad el 14 de enero, despeje el calendario del congreso se van a apaciguar los ánimos en las bases, incendiadas todavía por la abstención a Mariano Rajoy y el desalojo del poder de Pedro Sánchez. A partir de ahí, son muchas ya las voces que defienden que en ese tiempo de trabajo previo al conclave hay que buscar "un gran acuerdo orgánico", así lo definen distintas fuentes socialistas, que en privado añaden que ese acuerdo, para ser viable, tendría que producirse en torno a Susana Díaz. Un acuerdo, por tanto, que permitiría que la presidenta andaluza llegara sin rival a las primarias para la secretaría general.
Hasta la fecha, han querido evitar este escenario a toda costa ("candidato en frente va a tener", vienen diciendo desde esas filas desde hace dos meses), pero lo cierto es que ha extendido la opinión de que la candidatura de Pedro Sánchez no resolvería la crisis interna y todavía no ha emergido ningún perfil que ponga cara a esas aspiraciones. El nombre de Patxi López, expresidente del Congreso, siempre aparece en este punto pero él, por el momento, no ha desvelado sus cartas y quienes le conocen dudan de que vaya a ir a un enfrentamiento directo con la presidenta andaluza.
Esa indefinición es la que quieren aprovechar algunos dirigentes territoriales y veteranos que apoyan a Díaz que están hablando de buscar la "integración" de quienes han estado hasta el final con Pedro Sánchez. Patxi López sería la pieza más simbólica de esta operación porque, aunque acató la disciplina de voto, se quedó al lado del exlíder socialista cuando quiso precipitar el congreso socialista antes de unas terceras elecciones frente a la opinión de todos los pesos pesados del partido, los presidentes autonómicos (menos Francina Armengol) y los exsecretarios generales.
Hasta ahora, la gestora se había desmarcado de la búsqueda de una candidatura de unidad. Su presidente, Javier Fernández, rechazó en rueda de prensa estar trabajando en esa dirección y se mostró convencido de que habrá más de una lista en ese cónclave pero, aunque con prudencia, su número dos, Mario Jiménez, sí que ha admitido este lunes que un congreso de unidad daría fortaleza al proyecto socialista.
