La Fiscalía sitúa a Blesa como responsable de la "rapiña" en Caja Madrid

Madrid

Con la nueva petición de cárcel por los sobresueldos de Caja Madrid, su expresidente Miguel Blesa acumula un total de 10 años de presidio solicitados por la Fiscalía Anticorrupción. A los cuatro reclamados por el incremento arbitrario e irregular de los salarios del comité de dirección, se unen los seis años de prisión solicitados en el juicio por las tarjetas black, que ya se encuentra en su recta final.

Ambas causas retratan una situación similar, con Miguel Blesa como responsable de actuar a espaldas de la asamblea de Caja Madrid y de los órganos de control de la caja para saquear la entidad, en una actitud de "pillaje y rapiña" según el fiscal de las black, Alejandro Luzón, además de "depredadora" y "perversa".

Miguel Blesa, según los investigadores, no solo fue el responsable de instaurar el "subrepticio, opaco e ilegal" método de las tarjetas black, con las que llegó a gastar 426.688,42 € en negro, sino que gozó de un sueldo multimillonario que incrementó "de forma arbitraria", por encima de lo pactado y ocultándolo al órgano que debía aprobarlo: el Comité de Retribuciones de Caja Madrid.

Al tiempo que tiraba de plástico opaco, Blesa ganaba 1.7 millones de sueldo en 2006. Un año después lo duplicó hasta superar los 3.5 millones. La crisis de 2008 no afectó al bolsillo del expresidente de Caja Madrid porque en ese ejercicio y el siguiente ganó una media de 3.5 millones anuales más, y cuando fue cesado en 2010 y sustituido por Rodrigo Rato, cobró una indemnización de 2.7 millones de €.

En el caso de las tarjetas black, la causa quedará en breve lista para sentencia. En el de los sobresueldos de Caja Madrid, la titular del juzgado 45 tendrá que decidir en unos días si archiva la causa u ordena la apertura de juicio oral.