Los españoles somos los ciudadanos del mundo con más posibilidades de acceder a un trasplante cuando lo necesitamos. Los datos lo avalan, un año más nuestro país vuelve a alcanzar máximos históricos en donación y trasplantes, con más de 2.000 donantes y 4.818 órganos trasplantados. Según la Organización Nacional de Trasplantes estos buenos resultados se deben al plan para fomentar la donación en asistolia, es decir, cuando se para el corazón del enfermo. Este tipo de donación representa ya el 24% del total de donantes fallecidos. Junto con la asistolia, la implicación de los médicos de urgencias es otra de las claves para explicar el incremento en el número de donantes. En los últimos años se ha acentuado el envejecimiento de los donantes, en el pasado también. Más de la mitad, el 546%, supera los 60 años y casi un diez por ciento los 80. El pasado año se registró el máximo histórico con un donante hepático de 94 años. Las negativas familiares se mantienen en torno al 15%. Por comunidades autónomas, lidera el ranquin de donantes Cantabria, con una tasa de 655 donantes por millón de personas, seguida del País Vasco, Navarra, Murcia y La Rioja. En porcentaje, las Comunidades que registran un mayor crecimiento son Cataluña, País Vasco y Andalucía. En 2016 también se ha registrado un nuevo récord en el número de nuevos donantes de médula ósea, 74.397, con una media de 200 adhesiones diarias. A 1 de enero de 2017 en España había 281.969 donantes de médula ósea. Por comunidades autónomas destaca el incremento de donantes en Andalucía, Aragón y Asturias.