Los vehículos que circulen por París deberán señalar cuánto contaminan

Madrid

Todos los vehículos que circulen por París deberán mostrar cuánto contaminan mediante unas etiquetas elaboradas por el Ayuntamiento de la capital francesa. Estas pegatinas, que van de la verde a la gris, determinan los diferentes grados de contaminación de los vehículos, lo que ayudará a restringir el tráfico cada vez que se produzcan picos de polución.

El Ayuntamiento ha explicado que estas etiquetas serán necesarias para circular por el centro de la ciudad entre las ocho de la mañana y las ocho de la tarde de lunes a viernes. Por lo tanto, todo aquel que quiera acceder a París deberá en este horario deberá hacerlo con este etiquetado. A partir de esa hora, el resto de turismos podrá acceder sin ningún distintivo que muestre el grado de contaminación del vehículo.

Etiquetas descargables en Internet

Estas etiquetas van desde la verde, destinada a los coches eléctricos y aquellos que cuentan con propulsión con hidrógeno, hasta la gris, para todos aquellos turismos de la norma Euro 2. Las etiquetas pueden ser adquiridas a través de una página web elaborada por una página del Ministerio de Ecología.

Por el momento, el Ayuntamiento de París ha asegurado que no se sancionará a aquellos turismos que carezcan de su etiqueta correspondiente durante los primeros meses de vigencia. No obstante, cuando se normalice su uso, se espera que las multas asciendan hasta los 68 euros en el caso de los coches y 135 en el caso de las furgonetas.

París, una de las capitales que más lucha contra la contaminación

París es una de las capitales europeas que más lucha contra el problema de la contaminación. En julio de 2016, la ciudad prohibía la circulación por la capital francesa a los vehículos más contaminantes los días laborables desde las 8 de la mañana hasta las 8 de la noche. Debido a esta medida, todos aquellos turismos que lleven en circulación desde antes de 1997 no pueden acceder al centro de la ciudad de lunes a viernes.

Pero no es la única medida que ha llevado a cabo el Ayuntamiento de París. La capital también ha implantado una serie de ayudas económicas para todos aquellos ciudadanos que renuncien a su coche privado, un 50 por ciento de descuento por usar coches eléctricos compartidos y ayudas de hasta 400 euros para la compra de una bicicleta.

Además, desde marzo de 2016, París implanta la circulación alterna cuando la concentración de partículas finas superase los 50 microgramos por metro cúbico. Al igual que ha sucedido recientemente en Madrid, los vehículos con matrículas impares circulan los días impares y las pares los días pares.

En definitiva, París continúa con su lucha para hacer frente a la contaminación y reducir los altos niveles de contaminación que afectan tanto a su ciudad, como a sus habitantes. De cara al futuro, la capital francesa tiene como objetivo prohibir totalmente los diésel para 2020.