Podemos da por 'amortizada' su actual ejecutiva

Madrid

La última reunión del Consejo de Coordinación de Podemos, el órgano ejecutivo del partido, se celebró el pasado 5 de diciembre; tras aquella reunión Pablo iglesias anunció la convocatoria de un referéndum en el que las bases debían decidir sobre el formato de Vistalegre II pronunciándose a favor de las tres propuestas sobre la mesa: la pablista, la errejonista y la anticapitalista.

El resultado de la consulta (41% Iglesias, 39% Errejón) hizo saltar por los aires el precario equilibrio de fuerzas entre corrientes y ha desembocado en una situación que roza la fractura interna. En este contexto, la ejecutiva lleva más de un mes sin reunirse y, según confirman fuentes de la formación morada la Cadena SER, no está previsto que se reúna antes de Vistalegre II. De esta manera, la próxima reunión del Consejo de Coordinación será con el nuevo el órgano que salga del próximo congreso; Algo que de facto supone dar por "decaída" o "amortizada" la actual ejecutiva. Con un Podemos centrado del todo en su próximo congreso, el único órgano ejecutivo estatal que se reúne periódicamente es la comisión técnica (en la que están representadas las tres corrientes) que tiene como objetivo, precisamente, organizar la Asamblea Estatal de febrero.

Un acuerdo difícil pero deseado por Iglesias

La conversación entre sectores está centrada ahora en el acuerdo que buscan tanto pablistas como errejonistas para concurrir juntos en el próximo congreso y evitar el coste político que supondría la confrontación directa en Vistalegre II.

"Creo que no hay contradicción y creo que quienes creen que tiene que haber un Podemos que sólo está en la calle y otro que sólo está en las instituciones se equivocan y por eso yo voy a seguir buscando la unidad "decía Iglesias sobre la posibilidad de un acuerdo, "soy muy optimista, creo que vamos a ser capaces de hacer un encuentro de las mejores ideas", aseguraba también este domingo Errejón.

Con opciones tan enfrentadas como las que se han puesto de manifiesto en los documentos políticos de las distintas corrientes, la negociación no va a ser fácil, pero incluso un cierre en falso permitiría Iglesias concurrir a Vistalegre como un líder capaz de resolver la fractura interna, algo que le demandan las bases. El principal factor a favor de la posibilidad de un pacto es que Pablo Iglesias lo quiere.