El PSOE quiere situar a Conde Pumpido como magistrado del Tribunal Constitucional
Socialistas y populares trabajan en un acuerdo para renovar las cuatro plazas vacantes a propuesta del Senado
Esta renovación sigue dejando infrarrepresentadas a las mujeres: seguirían siendo solo dos magistradas de los 12 integrantes del Pleno del Alto Tribunal
El fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, atiende a los periodistas a su llegada al Tribunal Supremo / EFE
Madrid
El PSOE quiere que exfiscal general del Estado, Cándido Conde Pumpido, sea magistrado del Tribunal Constitucional. Como ya adelantó la Cadena SER, los socialistas llevan semanas negociando con el Partido Popular la renovación de las cuatro vacantes del Alto Tribunal a propuesta del Senado, cupo por el cual el exfiscal general entraría como magistrado. Para esta renovación se necesita una mayoría de 3/5, por lo que los escaños del PP son insuficientes.
El nombre de Cándido Conde Pumpido lo va a elevar el grupo socialista de la Asamblea de Madrid, según informan a la SER fuentes del PSOE, porque los parlamentos autonómicos los que elevan inicialmente las candidaturas y, sobre ellas, decide luego el Senado. Entre los otros candidatos de los grupos socialistas con más posibilidades de ser magistrados, distintas fuentes sitúan a María Luisa Balaguer, consejera del Consejo Consultivo de Andalucía, experta en Igualdad. Balaguer es la propuesta que el PSOE andaluz ha registrado en su Cámara autonómica y estaría bien situada en esa carrera aunque el acuerdo, según insisten las fuentes consultadas, sigue abierto; de hecho, los parlamentos tienen hasta el 10 de febrero para hacer propuestas.
Para las otras dos plazas que tiene que elegir el Senado, el Partido Popular plantea a dos hombres: al catedrático de Derecho del Trabajo Alfredo Montoya y a Ricardo Enríquez, que ya es magistrado. Las mujeres, por tanto, seguirían estando infrarrepresentadas en el Pleno del Tribunal Constitucional: vuelve a haber solo dos magistradas entre los 12 integrantes del Pleno.
Distintas fuentes de PSOE y PP coinciden en que el acuerdo se va a cerrar, aunque se sigue trabajando en ello. Si es así, la primera consecuencia será que deja sin margen a otras fuerzas políticas, especialmente a Podemos, para situar a un candidato de su cuerda. Hay dirigentes socialistas que coinciden con el PP en que hay que evitar que un magistrado vinculado a la formación morada pueda "distorsionar" el normal funcionamiento del Constitucional.
De hecho, si en algo insisten los socialistas consultados sobre este acuerdo es en que, si finalmente llega a buen término, servirá para demostrar el compromiso del PSOE con las instituciones y, también, para demostrar la diferencia con el Partido Popular. La anterior renovación tardó tres años en producirse, según subrayan, por el bloqueo del PP cuando gobernaba José Luis Rodríguez Zapatero.
