14 muertes de 'Juego de tronos' que todavía no has superado
Además participa en nuestra ENCUESTA: ¿qué personajes morirán en la séptima temporada de la serie?
Madrid
La muerte es un tema excesivamente recurrente en la serie Juego de tronos, pero eso no es un problema. Es más, su éxito reside precisamente en la libertad que se toma la serie de HBO a la hora de eliminar a cualquiera de sus protagonistas.
Durante las seis temporadas (emitidas) hemos sido testigos de cómo un sinfín de personajes perdían la vida de diversas formas. En Cadena SER nos hemos tomado la licencia de recopilar esas 14 muertes que todavía no has superado:
La injusta pero necesaria muerte de Ned Stark
La propia memoria histórica de Juego de tronos recuerda la pérdida de Robert Baratheon y Khal Dogo. Sin embargo, los fans de la serie no superarán nunca la muerte de Ned Stark.
El patriarca de la casa Stark fue decapitado por orden de Joffrey ante la presencia de sus dos hijas: Arya y Sansa. Sin duda, un punto de inflexión en Juego de tronos y el desencadenante de todo lo que ha acontecido en la ficción desde entonces.
La sombra de Renly Baratheon
Tampoco olvidamos a Renly Baratheon. Su muerte fue necesaria para introducir en este juego de ajedrez a personajes tan importantes como Margaery Tyrell o Brienne de Tarth. Sin embargo, sus intereses privados hacían todavía más emocionante los líos de palacio.
Las víctimas de la Boda Roja
No cabe duda de que la Boda Roja es uno de los acontecimientos más oscuros de Juego de tronos y hay razones suficientes que así lo corroboran. Esta celebración se cobró la vida de Robb Stark y Catelyn Stark, un giro de guion que a día de hoy sigue causando malestar a más de uno.
La masacre de la cuarta temporada
Si en las tres primeras temporadas nos arrebataron a figuras tan importantes, George R.R. Martin, artífice de la historia original, se encargó de recordarnos que todo esto no había hecho más que empezar.
En la cuarta temporada tuvimos que decir adiós a otros imprescindibles como Joffrey Baratheon, envenenado en su propia boda; Oberyn Martell, estrangulado por la Montaña; Ygritte, herida mortalmente por una flecha; y Twin Lannister, asesinado por el propio Tyrion mientras hacía uso de la letrina.
¿Quién no echa de menos ese sentimiento irrefutable de odio hacia el hijo mayor de Cersei? ¿Y ver a Oberyn haciendo uso de sus armas de seducción?
La pequeña Shireen
Especialmente cruel fue la escena en la que la princesa Shireen, hija de Stannis Baratheron, era quemada en la hoguera bajo la atenta mirada de sus padres, la Sacerdotisa Roja y el ejército.
Quizá nunca llegó a ser un personaje de primera categoría, pero sus pocas intervenciones ponían ese toque afectivo tan necesario en una ficción a veces muy oscura.
La última "matanza"
Los creadores de la serie también hicieron una buena limpieza durante el trascurso de la sexta temporada. Cuanto todavía estábamos asimilando la necesaria resurrección de Jon Snow, Juego de tronos nos arrebató para siempre, y de la manera más cruel, a personajes irremplazables como Hodor, Rickon Stark, Tommen Baratheon, Margaery y Loras Tyrell.
Si algo hemos aprendido de Juego de tronos es que nadie está a salvo de las ocurrencias de George R.R. Martin y el equipo creativo de Juego de tronos. Ahora bien, ¿quiénes serán los próximos en caer?