El Barcelona apela la segunda amarilla de Luis Suárez ante el Atlético en la Copa
El delantero uruguayo del Barcelona dijo al término del partido ante el Atlético en la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey que su expulsión "se veía venir"
Madrid
El Barcelona apelará la segunda amarilla que vio el uruguayo Luis Suárez y que le costó la expulsión en la vuelta de semifinales de la Copa del Rey ante el Atlético de Madrid. El delantero, precisamente, realizó unas duras declaraciones contra el árbitro que podrían costarle una sanción si el Comité de Árbitros decide presentar una denuncia en su contra al Comité de Competición.
"Me río. Parece que era lo que quería". Así interpreta Luis Suárez la decisión del colegiado Gil Manzano de expulsarle por doble amarilla en el encuentro de vuelta de semifinales de la Copa del Rey entre el Barcelona y el Atlético de Madrid.
Lo dijo en declaraciones a GOL al término del partido, donde dijo que en la jugada en la que se le mostró la segunda amarilla ni siquiera había falta. Por ese motivo abogó porque el club apelara esa amonestación con el fin de poder estar en la final de la Copa del Rey, una medida que ha tomado el club este miércoles.
El uruguayo manifestó en la entrevista su "indignación" y manifestó claramente su malestar con los árbitros: "Acá ya se sabe cómo va". De hecho, al comentar su primera amarilla también destacó que "se veía venir".
El acta de Gil Manzano
El delantero no quiso irse a los vestuarios tras ser expulsado en el minuto 90 del partido, según denunció en el acta del árbitro. El colegiado extremeño hizo constar en el apartado de 'otras incidencias' que el punta uruguayo, "una vez expulsado, retrasó su salida del terreno de juego de manera considerable", haciendo "caso omiso" a sus instrucciones y que se quedó al lado del banquillo viendo el final del partido.
"Una vez fuera del terreno de juego, se quedó en las escaleras de acceso al túnel de vestuarios observando el partido hasta que éste terminó, aunque el cuarto árbitro comunicó en reiteradas ocasiones que tenía que irse los vestuarios, haciendo nuevamente caso omiso a estas instrucciones ", añade en el acta.