Trudeau defiende la política de asilo de Canadá sin criticar a Donald Trump
El presidente estadounidense aprovecha la rueda de prensa junto al primer ministro canadiense para asegurar que Corea del Norte es un gran problema y que están lidiando con él de un modo contundente
El presidente de los Estados Unidos, Donald J. Trump (d), posa junto al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau (i), en el Despacho Oval de la Casa Blanca, en Washington, Estados Unidos / SHAWN THEW (EFE)
Madrid
El encuentro en Washington entre el presidente de EEUU, Donald Trump, y el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, ha mostrado dos caras opuestas de hacer política, de entender el mundo. A pesar de las importantes diferencias políticas, los dos líderes han mantenido un encuentro cordial y respetuoso, el propio Trump aseguró que la relación comercial con su vecino del norte es “espectacular” aunque hará algunos retoques, aseguró Trump sobre su objetivo de renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), firmado por estos dos países y México.
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En contraposición a Canadá, en la frontera sur se da una situación "mucho más grave", con un comercio con México que durante muchos años "no ha sido justo" para EEUU, aseguró Trump en la rueda de prensa conjunta con el primer ministro canadiense, el primer encuentro con Trudeau desde que Trump asumió la presidencia de EEUU el pasado 20 de enero.
Relaciones comerciales al margen, otro de los temas importantes sobre la mesa era la atención de ambos países a los refugiados. El primer ministro canadiense aseguró que no va a dar "lecciones" al presidente de Estados Unidos sobre acogida y seguridad, pero que Canadá mantendrá su espíritu de "apertura hacia los refugiados" y aseguró que Canadá "continuará con su política de apertura hacia la inmigración y los refugiados, sin comprometer la seguridad", lo que contrasta con las órdenes ejecutivas de Trump, que han intentado suspender todo el programa de asilo estadounidense. El presidente estadounidense ha defendido sus políticas asegurando que sus órdenes migratorias tienen como objetivo "echar a los muy, muy malos". Trump defendió el aumento de las redadas de detención de indocumentados en el país, y aseguró que es una promesa electoral para "capturar a los criminales, a los malos criminales, con historial de abusos y problemas, y echarlos".
Durante su comparecencia, Trump ha abogado por mantener una cooperación estrecha con Canadá para "proteger" los empleos en el continente y "mantener a todo el mundo seguro”. “Somos más fuertes cuando unimos fuerzas", enfatizó Trump en compañía de Trudeau desde la Sala Este de la Casa Blanca.
