Cuatro años de cárcel para dos personas de Cuenca por apalear vecinos a cadenazos

Madrid

La Audiencia Provincial de Cuenca ha condenado a cuatro años de cárcel a dos personas que en agosto de 2013 apalearon a varios vecinos en el parque de Santa Ana de la capital conquense, usando entre otras cosas una cadena de hierro. La defensa de los condenados ya ha anunciado la interposición de un recurso ante el Tribunal Supremo por lo que la sentencia no es firme y no se ha instado su entrada en prisión.

Según la sentencia, los hechos tuvieron lugar en agosto de 2013: los dos condenados, un hombre y una mujer, se dirigieron al parque de Santa Ana de Cuenca con una cadena de hierro, una muleta y una barra con forma de garrota y pegaron una paliza primero a un hombre y después a una mujer que paseaba con su hijo de quince años. Lo hicieron, según la sentencia, acompañados de gente que no ha sido identificada y de dos menores de edad.

Fueron dos palizas consecutivas. La primera se saldó, entre otras lesiones, con una fractura en la mandíbula. La segunda con el menor de quince años sufriendo un traumatismo craneoencefálico y varios puntos de sutura, con la madre teniendo también lesiones similares. Fuentes del caso aseguran que víctimas y agresores se conocían.

Ahora la Audiencia Provincial ha confirmado una condena de cuatro años de cárcel para cada uno por un total de cuatro delitos de lesiones: también tendrán que indemnizar a sus víctimas con más de cinco mil eurosentre los tres, la mayor parte para el hombre que sufrió la fractura de mandíbula. Los jueces describen las armas que utilizaron para dar las palizas y su peligrosidad: una cadena de hierro de metro y medio y un cable de acero recubierto de goma negra. "No es necesario mayor detenimiento para justificar que la cadena es instrumento peligroso. Era de hierro, larga y terminada en extremo punzante", explica la sentencia.

Fuentes conocedoras del caso aseguran que, al haber anunciado la defensa de los condenados la interposición de un recurso ante el Tribunal Supremo, la sentencia todavía no es firme y por ahora no se ha instado su ejecución con entrada en prisión.