El Comité de Árbitros da la razón a Gil Manzano en el penalti de Bruno
La posición de la mano del jugador, clave para considerar que la acción del Villareal era penalti
Los jugadores del Villarreal protestan la actuación del Gil Manzano en el partido ante el Real Madrid. / Fotopress (Getty Images)
Madrid
El penalti señalado por Jesús Gil Manzano en el Estadio de la Cerámica, y que supuso el empate momentáneo del Real Madrid, ha creado un debate interno importante dentro del mundo del arbitraje. Debate constructivo, porque todos coinciden en señalar que el colegiado extremeño actuó bien en directo, pero debate al fin y al cabo.
La duda radica en la velocidad con la que sale el balón rebotado de Victor Ruíz. Los árbitros consultados por la Cadena Ser dicen que no es penalti, alegando que la pelota viene de un compañero situado a una distancia muy corta y por tanto la acción es totalmente involuntaria. “Hay que verla repetida en televisión para llegar a esta conclusión”, dicen de manera unánime, “porque la posición poco natural del brazo puede llevar perfectamente al error”.
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El criterio del Comité Técnico de Árbitros (CTA), por su parte, sí ve penalti en la acción de Bruno Soriano. Basándose en la circular emitida por este comité el 6 de Agosto de 2015, afirman que “no se considerará mano deliberada, cuando un jugador juega el balón de forma accidental si el balón procede de un rebote de la pierna o el cuerpo del mismo jugador que lo disputa”.
Esto hace que la jugada de Villareal no siga los argumentos planteados por Fran Escribá y se juzgue según la interpretación de Gil Manzano. Es una mano por omisión, en una posición “no natural” y que le llega a una velocidad lo suficientemente lenta como para poder retirarla. Así lo ha analizado el CTA en la jornada posterior el encuentro, lo que da la razón al colegiado.
Esta situación puntual sólo ocurre en España por la circular citada, ya que la norma general de FIFA y UEFA solo habla de castigar la mano cuando sea “deliberada”. Es una acción que, si el VAR se pusiera en marcha, quedaría en manos del árbitro.
El colectivo arbitral considera que el fútbol es un deporte donde la compresión del error debería ser un tema ya superado y ven utópico que este sea entendido como algo normal en un entorno cada vez más interesado en no querer entenderlo. Ven una perdida interesada de confianza, algo que no tiene arreglo.
