Política
Operación Lezo

Rajoy, tras los escándalos de corrupción, reivindica el orgullo de ser del PP

Asegura que el PP cree en el sometimiento de "todos" a la ley y a los tribunales de Justicia "tomen las decisiones que tomen"

El presidente del Gobierno, a las nuevas generaciones: "Portaros bien, porque la gente del PP no se porta mal nunca"

AMP.- Rajoy, tras los escándalos de corrupción, reivindica la labor del PP y pide unidad a los suyos

Rajoy a las nuevas generaciones: "La gente del PP no se porta mal nunca" / VÍDEO ATLAS

Sevilla

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha reivindicado este viernes la labor del Partido Popular y ha pedido sentirse "orgulloso" de lo que han hecho estos años porque han dado la "vuelta" a la situación económica. Dicho esto, ha reclamado unidad a los suyos porque el "peor error" es generar división, al tiempo que ha señalado que su partido cree en el sometimiento de "todos" a la ley y a los tribunales "tomen las decisiones que tomen".

Rajoy se ha pronunciado así en su intervención en la inauguración del XIV Congreso Nacional de Nuevas Generaciones que se celebra en Sevilla, tras una 'semana negra' en la que se han conocido nuevos casos de corrupción que afectan al PP, como el presunto desvío de fondos del Canal de Isabel II que ha terminado con la detención del expresidente de la Comunidad de Madrid Ignacio González.

Si a su llegada al cónclave de NNGG ha rehusado contestar a las preguntas de los periodistas sobre la detención de González o la situación en la que queda la expresidenta de la Comunidad Esperanza Aguirre, Rajoy ha aprovechado su discurso para poner en valor la gestión que ha realizado el PP a lo largo de todos estos años, en especial durante la crisis económica, recuperando la idea de que en política la mayoría de los políticos son honrados. Éste es uno de argumentos que ha esgrimido el partido con frecuencia estos últimos años al hilo de las informaciones sobre el 'caso Bárcenas' y el 'caso Gürtel'--.

"La política merece la pena"

Así, el jefe del Ejecutivo ha abierto su discurso ante los jóvenes del PP reivindicado la política y la gestión que realizan decenas de cargos públicos cada día. "La política merece la pena, si las cosas se hacen bien si uno se lo toma en serio, si trabaja y si cree en lo que hace, la política merece la pena", ha manifestado.

Dicho esto, Rajoy ha aconsejado a los miembros de Nuevas Generaciones esforzarse y trabajar. Y ha recalcado que en la vida hay que "trabajar, hablar, dialogar, tener personalidad" y no "asustarse" cuando a uno le "atizan". A su entender, si crees en algo y en alguien hay que defenderlo. El presidente del Gobierno ha admitido que en política, como en cualquier faceta de la vida, "las cosas hay que tomárselas en serio" y ha agregado que "la política es muy complicada". "La inmensa mayoría de las personas que se dedican a la política y he conocido a muchas, porque llevo muchos años, es gente que se esfuerza, trabaja, que a veces acierta, que a veces se confunde, pero que trabaja por aportar algo a su país", ha asegurado.

Llamada a la unidad

Ante una semana convulsa en las filas del PP por las noticias de la corrupción, el presidente del Gobierno ha pedido a los miembros del Partido Popular "mantener siempre la unidad" porque él ha aprendido a lo largo de su carrera política que el "peor error", la "peor equivocación" y el "mayor disparate" es "generar división en lugar de trabajar para generar unidad". Después, ha compartido algunos de los mensajes del presidente de NNGG de Andalucía, Luis Paniagua, pidiendo a los miembros de la organización juvenil que sean "felices" y portarse "bien" en el debate de las ponencias que se aprobarán en el Congreso. "¡La gente del PP no se porta mal nunca, ni en las ponencias ni en ningún otro sitio!", ha bromeado, provocando las risas del auditorio.

Además, ha afirmado que las ideas del PP están recogidas "muy bien" en la Constitución, que defiende la libertad, los derechos humanos, la igualdad entre españoles o la soberanía nacional. Y ha añadido que creen también en el progreso económico, en la persona como motor de ese progreso y en el Estado de Derecho y el "sometimiento de todos a la ley y a los tribunales de Justicia, tomen las decisiones que tomen". En su opinión, un país en el que las reglas de juego se discuten "no tiene futuro".

 
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