Míchel, de víctima a posible verdugo

Madrid

La imagen de un Míchel totalmente ido mientras es consolado por Quique Estebaranz es, sin duda, la más recordada de unas fechas fatídicas de la centenaria historia del Real Madrid. 

Era junio de 1993 y la pesadilla se había repetido de nuevo. El Madrid perdía su segunda Liga consecutiva ante el mismo rival, el Tenerife, y en el mismo escenario, el Heliodo Rodríguez López. El más animoso de la Quinta del Buitre sufrió ambas decepciones en sus propias carnes.

En una situación bien distinta está ahora, 24 años después. Porque ahora en lugar de ser 'víctima' de la tragedia, está en el papel de verdugo.

El recuerdo de las Ligas de Tenerife

<h4 itemprop="alternativeHeadline">Carlos Martínez, narrador en Canal+ de aquellos dos partidos, y Jesús Gallego, inálambrico del Real Madrid en la segunda, cuentan de primera mano cómo se vivieron aquellos dos partidos ya históricos</h4>

Es su equipo, el Málaga, ahora el Tenerife de antaño. El que con una victoria puede dejar a Zidane y sus chicos sin el título. Y es por eso por lo que está en el punto de mira.

Porque hace unas semanas y cuando aún no se sabía que sería en la última fecha, en el Málaga-Real Madrid, donde el equipo blanco se jugaría, literalmente, la Liga, Michel dijo en tono irónico: "yo soy mucho más madridista que Valdano [entrenador del Tenerife entonces] porque estuve muchos más años en la disciplina del Real Madrid". También soltó: "prefiero hacer el pasillo al Real Madrid que la puñeta".

Confirmado ya de que será en La Rosaleda donde el Madrid se juegue la Liga, Míchel ha querido ahuyentar las suspicacias que hay, sobre todo en Barcelona, diciendo que "el que me conoce sabe que voy siempre a competir y ganar porque es lo que más gusta" y que "es mi Real Madrid, pero también es mi Málaga. Tengo que cumplir con lo que me enseñaron allí. Tengo que respetar la competición e ir a ganar siempre".