La moción de censura para 'dummies'

Irene Montero: ha nacido una parlamentaria

Madrid

Ha sido la frase más repetida por todos los analistas. Irene Montero fue la encargada de abrir el debate de moción de censura que impulsaba su grupo parlamentario y lo hizo con un discurso de más de dos horas donde demostró que sabe modular su tono, su ritmo y, sobre todo, confeccionar un discurso brillante. Estamos acostumbrados a escucharla con un tono agresivo y, aunque algo de eso hubo, este martes fue más allá. Se le puede recriminar la mezcla de datos (contrastadísimos y no tanto), la duración de su intervención y su rapidez, que a veces complicaba su asimilación, pero su relato fue completo y ordenado. A pesar de llevar un taco de folios, apenas los miró de soslayo. Por todo, Irene Montero se ha revelado como una parlamentaria excepcional.

El PP, a sus cosas

El Partido Popular, el partido en el Gobierno contra el que se dirigía esta moción de censura, se ha esforzado en ningunear la moción de censura. Partían con la ventaja de saber que no iba a salir adelante, es verdad, pero la suma de descalificativos y gestos durante estos dos días sólo ha servido para dar más motivos a la oposición. Durante los discursos de Irene Montero y Pablo Iglesias hemos visto a Méndez de Vigo leyendo un libro y a otros ministros y parlamentarios mirando el móvil insistentemente. Pero quizá lo que se ha llevado la palma ha sido la ausencia de Mariano Rajoy y un buen número de diputados del PP este miércoles por la mañana. A las 11:00, después de dos horas de debate, este era el aspecto de la bancada popular:

Pablo Iglesias le tira los tejos al PSOE

Ha sido muy significativo que el titular de la intervención de Iglesias durante la moción de censura contra el PP se lo haya llevado el PSOE. Su ofrecimiento a los socialistas fue lo más relevante de su discurso de más de tres horas: "Ojalá nos pongamos de acuerdo para sacar al PP del Gobierno más temprano que tarde, pero no nos digan que es posible con la muleta naranja", dijo tras reconocer los errores del pasado. El portavoz del PSOE, José Luis Ábalos, le respondía este miércoles: "Si hace un año no hubieran votado en contra de Sánchez nos habríamos ahorrado esto, tendríamos un Gobierno socialista y estaríamos mucho mejor". Aun así ha agradecido el tono a Pablo Iglesias frente a los insultos del pasado y coincide con él en que “este Gobierno bien merece una censura” pero no así ni ahora.

Rajoy volvió a cortocircuitar

"Cuanto peor mejor para todos y cuanto peor para todos mejor, mejor para mí el suyo, beneficio político". Así lo soltó el presidente. Y con tono decidido y todo. La cara de Pablo Iglesias lo decía todo. Había vuelto a ocurrir: Rajoy construía una frase sin sentido y el ingenio de Twitter se disparaba.

Iglesias y Rivera, más distanciados que Pimpinela

Lo de Pablo Iglesias y Albert Rivera tiene pinta de ser un amor imposible. El de Podemos ya dejó claro el martes que está dispuesto a tener un romance con el PSOE pero nada de tríos con Ciudadanos. Rivera, en cambio, está convencido de que lo que quiere Podemos es acabar con el PSOE. Un ménage à trois que, aunque estén en los sueños de muchos, puede que nunca llegue a producirse.

Ana Pastor llama la atención a Celia Villalobos

Durante estos dos días de debate, la presidenta del Congreso, Ana Pastor, ha tenido que llamar al orden en más de una ocasión recordando que el Hemiciclo "no es un circo ni una taberna". Lo que no suele ser habitual es que mande callar directamente a un diputado concreto. Este miércoles lo ha hecho y la destinataria era Celia Villalobos: "Señora Villalobos, se le escucha a usted hasta aquí". Mientras estaba Pablo Iglesias en la tribuna, la diputada le ha espetado desde su escaño: "Busque en el diccionario el significado de las palabras moderado y humilde". El tono de voz era tan alto que ha llegado hasta en la Mesa del Congreso.

Hernando y la relación Montero-Iglesias

El cara a cara entre Rafa Hernando y Pablo Iglesias ha sido duro desde el principio pero en cada réplica subía un escalón. Ya casi al terminar, el portavoz popular ha cruzado la línea: "Hay quien dice que estuvo mejor la señora Montero que usted, pero no diré yo esto porque no sé qué voy a provocar en esa relación". La indignación entre los diputados de Podemos era más que evidente. Ana Pastor tenía que volver a mandar callar.

Muerte por inanición

La primera jornada del debate fue maratoniana. Comenzó a las 9 de la mañana y, tras más de dos horas de discurso de Irene Montero, la intervención por sorpresa de Mariano Rajoy, las más de tres horas de Pablo Iglesias y las réplicas del presidente, les dieron las 5 de la tarde y sin comer. Rajoy, al menos, comía frutos secos furtivamente.

Oramas y el "tonito machista" de Iglesias

Canarias es la llave del Parlamento y lo sabe. Sus humildes escaños son muy preciados en un momento sin mayorías y sus discursos se escuchan cada vez con más atención. Cuando este martes, diputada de Coalición Canaria, Ana Oramas, subió al atril, recordó a Pablo Iglesias que ella sí puede sí "rendir cuentas" porque ella sí votó a favor de Pedro Sánchez para que hubiese un cambio y no dudó en reprocharle su "tonito machista con periodistas y políticas": "Yo sé que a usted no le gustan las mujeres no sumisas", llegó a decir. 

Iglesias, enamorado de Garzón

Cuando llegó el turno de las confluencias de Podemos y de Izquierda Unida, la miel rebosaba por todo el Parlamento. Los agradecimientos iban y volvían en todos los sentidos y, por lo que se escuchaba en ese momento, nadie pensaría que la moción de censura no iba a prosperar. Uno de los momentos más acaramelados lo ha protagonizado Iglesias con estas paralabras para Garzón: "Muchas gracias, Alberto, representas la tradición política más digna de este país. Para mí es un orgullo que caminemos juntos". Una declaración de amor en toda regla.

Moragas hace un Rajoy

Todavía tenemos en la memoria la imagen de Mariano Rajoy votando en contra de sus Presupuestos hace unos días y este miércoles ha vuelto a ocurrir: cuando ha llegado el momento de votar, Jorge Moragas ha votado a favor de la moción de censura. Celia Villalobos, sentada a su lado, le da un codazo y le dice "noooo". El diputado se ha vuelto a levantar y, sonriendo, ha dicho "sí". El mejor fin de fiesta.