El precio de la vivienda sube 7 veces más que los salarios desde el 'fin' de la crisis
En los tres últimos años, sueldos e IPC crecen menos del 2% mientras las casas se revalorizan cerca del 14%
El alquiler todavía sube pero se 'estabiliza' en grandes ciudades y zonas turísticas
Madrid
El precio de venta de una vivienda ha subido casi un 14% en los tres últimos años, desde 2014, pero el salario medio y el resto de precios (IPC) han crecido menos del 2%, siete veces menos, durante el mismo periodo, según puede extraerse del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Destaca la significativa diferencia Julio Rodríguez, ex presidente del Banco Hipotecario y experto en Vivienda. "Se puede decir que desde el inicio de la recuperación, en el primer trimestre de 2014, y hasta el mismo periodo de 2017, llevamos acumulada una subida de precios de la vivienda del 13,7%, que supera sustancialmente los aumentos del resto de precios y salarios", apunta Rodríguez, quien añade que esa buena coyuntura del mercado de la vivienda dificulta acceder a él.
Juegan un papel fundamental en la subida de precios los fondos y sociedades de inversión y las promotoras porque "hay una buena rentabilidad", señala el experto. "Puede decirse que en la fuerte subida de precios el papel de los inversores ha sido decisivo, mientras que en los nuevos hogares ese papel se ha trasladado al alquiler". Y resalta la "situación comprometida" en la que se encuentran esos nuevos hogares ante el aumento de los precios por el alquiler turístico, la reducción de la oferta y la mayor demanda, "hasta pasar de alquilar una vivienda a que tengan que alquilar habitaciones".
Estabilización del alquiler
Para Beatriz Toribio, responsable de Estudios de Fotocasa, la fuerza de la subida experimentada por los precios del alquiler se traslada ahora a la venta, sobre todo en Cataluña, Baleares, Canarias, Madrid y determinadas zonas de Andalucía.
"El alquiler sigue subiendo con fuerza, pero en áreas como Barcelona, donde el precio ha crecido hasta un 18%, ahora asciende un 7%", sostiene Toribio. Esa menor tensión en los precios se traslada a la venta, de modo que en la capital catalana "los precios de compra suben un 20% respecto al año pasado. Son datos que no hemos registrado en todo nuestro histórico y lo interpretamos como la vuelta de la financiación, la mejora económica y del empleo y el regreso de la confianza en el sector inmobiliario por parte de los inversores, pero también de los ahorradores que buscan rentabilidad", explica.
Aunque los precios crecen con intensidad, Toribio matiza que "estamos lejos de los años del boom". De hecho, los precios de venta han caído un 30% desde máximos de 2007.
"El precio del alquiler sube porque hay mucha demanda, hay mucha gente que no puede acceder todavía a la compra de una vivienda y también por el alquiler turístico, pero se está tendiendo hacia la normalización, la estabilización, no va a poder subir mucho más", prevé Toribio, para indicar asimismo que los repuntes "fuertes" de los precios del alquiler "se trasladan al cinturón de las grandes ciudades, a municipios como Sant Cugat, L'Hospitalet, Leganés, Parla, Navalcarnero o Colmenar Viejo".