La puntería traiciona al Atlético en Roma
Los de Simeone se marchan del Olímpico con la sensación de haber desperdiciado un buen ramillete de ocasiones para arrancar la Champions con una clara victoria
El delantero francés del Atlético Antoine Griezmann. / ALBERTO LINGRIA (Reuters)
Madrid
El Atlético de Simeone lo tiene todo: rigor, calidad, orden, esfuerzo... pero a veces le falta puntería. El primer partido de esta edición de la Champions, disputado en el Olímpico de Roma, volvió a ponerlo de manifiesto. Los colchoneros fueron muy superiores al rival pero se volvieron para Madrid con la sensación de haber desaprovechado demasiadas ocasiones. Las tuvieron Vietto y Correa, así como Saúl en los minutos finales, pero faltó tino.
El Cholo utilizó el encuentro para ratificar su confianza en Thomas, al que este año va a dar más minutos y responsabilidades en el centro del campo. Gabi, Koke y Saúl le secundaron, lo que hizo que Carrasco se quedara en el banquillo. Además, el técnico argentino volvió a poner arriba a Vietto pese a que no ha marcado en las oportunidades que ha tenido en lo poco que llevamos de temporada.
El centrocampista ghanés hizo bien su trabajo y, junto con sus compañeros, hizo que el Atlético se sintiera cómodo en la zona ancha. La responsabilidad ofensiva recayó en el costado izquierdo, por el que llegaron las primeras ocasiones. La primera acabó con un disparo de Saúl Níguez que se fue muy cerca del poste.
Thomas, en acción ante Dzeko. / MAX ROSSI
La Roma no se acercó con peligro a la portería de Oblak hasta bien avanzada la primera mitad. Antes, Griezmann intentó un remate acrobático que se fue alto y Vietto mandó un disparo de forma inocente a las manos del guardameta del equipo italiano.
Asentado en su estilo, el equipo de Simeone no sufrió y siguió disfrutando de ocasiones. La más clara, una de Koke y Griezmann en la que la defensa acabó sacando la pelota como pudo con el balón paseando por el área pequeña. Sin embargo, se marchó al descanso con el casillero a cero, lo que pone de manifiesto que el talón de Aquiles de este equipo es el mismo de los últimos años: la dificultad (a veces) para convertir su superioridad física y táctica en goles.
El portero, protagonista
La reanudación mostró lo mismo. Una Roma sin apenas peligro y un Atlético mandón pero con menos puntería que ocasiones. Vietto erró un nuevo mano a mano ante Alisson Becker, aunque en esta ocasión fue más mérito del portero que fallo del punta. No tuvo más tiempo el argentino y fue sustituido por su compatriota Ángel Correa, que también tuvo su oportunidad, al que el guardameta también le desbarató una buena jugada.
La defensa del Atlético saca una de las ocasiones del Atlético en el Olímpico. / MAX ROSSI
Carrasco saltó al campo por Gabi para tratar de llevar más peligro al marco italiano. El sustituido fue Gabi para que Thomas siguiera sumando minutos de calidad en la zona ancha. El susto llegó a falta de un cuarto de hora para el final, en una internada de Perotti en la que el exsevillista se fue al suelo cuando pisó el área rojiblanca. Juanfran no le tocó y no picó el colegiado serbio Mirolad Mazic.
Lo peor para los rojiblancos es que disfrutaron de ocasiones tan claras que hicieron que cogieran el avión de vuelta con la sensación de haber perdido una oportunidad de dar un golpe sobre la mesa de su grupo. Porque Saúl tuvo la más clara del encuentro justo antes del final. Puso en apuros a Becker en un cabezazo que parecía destinado a convertirse el gol. El portero acertó pero dejó el rechace en las botas del canterano del Atlético, cuya segunda intervención se fue al poste.l
- FICHA DEL PARTIDO
El partido, jugada a jugada:
Alfredo García
Coordinador digital de las emisoras de la SER. Anteriormente, y durante más de una década, fue responsable...
