El 70% de las denuncias por abusos sexuales a menores no llega a juicio
Un informe de Save the Children indica que las denuncias subieron el año pasado un 16% pero es una mínima parte
La ONG lamenta que la justicia funcione con muchos "prejuicios" y no crea el testimonio del menor, la única prueba
Madrid
Las denuncias por abusos sexuales a menores aumentaron un 15,8 % en 2016, pero el 70 % de los casos no son juzgados, según un informe publicado este miércoles por Save the Children. La única prueba con la que se cuenta es el testimonio del menor. La justicia cree que se "lo inventa" porque actúa con "prejuicios". Es la conclusión de la ONG que denuncia que el sistema falla y desprotege a las víctimas.
En su estudio Ojos que no quieren ver, Save the Children señala que las denuncias por abusos sexuales a menores pasaron de 3.502 en 2015 a 4.056 en 2016. Pero a pesar de este incremento, son muy pocas porque solo se denuncia el 15 %. Sigue siendo un delito "invisible y oculto". La ONG señala que la prevalencia es muy elevada porque entre un 10 y un 20 % de la población sufre en silencio estas situaciones y recuerda que el Consejo de Europa alerta de que uno de cada cinco niños y niñas han sido víctimas de abusos durante su infancia.
Según el informe, antes de dar el paso de denunciar los menores padecen los abusos un promedio de cuatro años; en seis de cada diez casos el abusador es alguien de su entorno (familiares, profesores, entrenadores o monitores); abusadores que se valen de su poder e influencia para imponer el silencio del menor mediante la "vergüenza, el chantaje y la amenaza".
"No son monstruos ni enfermos mentales" destaca el director general de la ONG Andrés Conde, sino personas cercanas que eligen a víctimas "vulnerables" y con "baja autoestima". En el 87 por ciento de los casos, el pederasta es hombre.
El perfil de la víctima, cuando se trata de niñas, sus edades oscilan entre los 7 y los 10 años. Su abusador es del entorno familiar. En el caso de los niños tienen 11 y 12 años que padecen los abusos de un adulto con autoridad como el profesor, entrenador o monitor. Save the Children alerta de que las consecuencias para los menores son "traumáticas" y uno de cada cinco sufre secuelas toda la vida.
La ONG alerta de que los menores están desprotegidos por las administraciones públicas a causa de los "fallos del sistema tanto en la prevención, en la detección, en el proceso judicial como en la atención y tratamiento psicológico a las víctimas". Por eso, urge a aprobar una ley para la erradicación de la violencia contra la infancia.
La investigación indica que en el 90 % de los procesos, la única prueba es el testimonio del menor al que se le obliga a repetir su declaración hasta cuatro veces. En siete de cada diez, el caso se archiva "provocando que el abusador pueda seguir en contacto con el niño".
Save the Children denuncia que la justicia actúa con "prejuicios". Los jueces tienen en la cabeza que "son casos extraordinarios, que los abusadores son monstruos o enfermos mentales o que los abusos son únicamente la violación y penetración, prejuicios que ponen en duda el testimonio del niño y que lo que cuenta es mentira", lamenta Andrés Conde quien cree imprescindible la formación de los profesionales.