Ceballos da aire al Madrid

El Madrid se plantó en Mendizorroza con la tranquilidad que le daba jugar lejos del Bernabéu. Porque sí, fuera de casa el Madrid es imbatible hasta ahora. Pero dentro la cosa cambia mucho.

Zidane, al que nada parece inmutarle, no sólo dijo en rueda de prensa, con su habitual tono tranquilo, que no estaba nervioso por ese escape de puntos en el Bernabéu -siete de nueve-, sino que lo demostró al llegar a Vitoria y dejó en el banquillo a Bale y Modric. Continuó el francés con sus habituales rotaciones y esta vez creó un centro del campo totalmente nuevo, con Ceballos y Lucas Vázquez de inicio.

El que tampoco se puso nervioso fue Ceballos, que se estrenó como titular no con un gol, sino con dos. El primero llegó cuando no se habían cumplido ni diez minutos de partido, cuando hizo gol. El sevillano batió con un buen derechazo a un Pacheco que hizo la estatua y marcó así su primer gol con la casaca blanca.

El segundo lo hizo a tres minutos para el final del primer acto y tan sólo dos después del gol del empate del Alavés. En este segundo, Ceballos marcó por fe más que por otra cosa. Una bola por alto para Cristiano terminó con el portugués por los suelos y con un rechace de Paqueco. El balón cayó al centro del área donde sólo esperaba Ceballos, que con un tiro por la derecha volvió a hacer diana.

Ese gol dejó mudo a una grada de Mendizorroza aún andaba festejando el primer gol del Alavés en lo que va de curso que había llegado apenas dos minutos. ¿Su autor? Manu García. Lo hizo con un gran testarazo después de una internada por la derecha de Munir.

Se vio en esa jugada lo que se lleva viendo en todo este inicio de temporada. Que el Madrid es mucho más vulnerable en defensa que el curso pasado. Que los equipos se plantan con bastante facilidad delante de Keylor. Y que tiene menos control del juego y concede más espacios. Es un Madrid menos poderoso y más frágil del de otros tiempos.

También quedó claro que Cristiano Ronaldo tiene un hambre voraz, pero que no tiene la suerte de su lado. Estampó el portugués hasta dos veces la bola en los palos de la meta de Pacheco. Ambos en el segundo acto. Al portugués se le vio totalmente desquiciado por ese poco atino.

También el larguero de Keylor repelió la pelota a un tiro de Pedraza -el internacional sub'21 dio mucho brío a su equipo al entrar por Burgui a falta de 25 minutos para el final-. Poco después, de nuevo un tiro Pedraza y de nuevo el palo volvió a salvar al Madrid del empate.

En la recta final del partido el Madrid pidió un penalti sobre Isco de Manu García, intentó aumentar la ventaja con tiros de Asensio, al que se le vio con menos chispa esta vez, y de Cristiano, pero no llegaron más goles. 

Esta nueva derrota del Alavés, que aún no ha sumado un solo punto en lo que va de Liga, le hunde un poco más en la tabla.

Así ha sido el partido: