La historia de la Arqueología en España
El museo Arqueológico Nacional expone hasta el próximo abril 'El poder del pasado' para celebrar su 150 aniversario
:quality(70)/cloudfront-eu-central-1.images.arcpublishing.com/prisaradio/RIIZDULP3BNA7OLCYR656KH4GY.jpg)
Escultura de Trajano del Museo Arqueológico de Sevilla y procedente de Itálica, que forma parte de la exposición "El Poder del pasado. 150 años de arqueología en España" / J.J. Guillén EFE
Madrid
Transmitir la historia, conectar con el pasado y construir identidades son las ideas en torno a las que gira El poder del pasado, la exposición con la que el museo Arqueológico Nacional conmemora su 150 aniversario. La forman 150 piezas prestadas por 70 museos, instituciones y colecciones privadas que explican la historia de la Arqueología en España desde que en 1867 la Gaceta de Madrid publicara el Real Decreto de creación del museo.
La muestra incluye mosaicos, vasijas, fósiles, ajuares funerarios, objetos de la vida cotidiana y tesoros que van desde la impresionante escultura en mármol de Trajano de Itálica hasta las delicadas piezas en oro que forman parte del tesoro de "El Carambolo". Según su comisario Gonzalo Ruiz Zapatero "las piezas transmiten una conexión real con el pasado, los objetos son conectores de experiencias de personas que los fabricaron, utilizaron y amortizaron y sólo por eso merece la pena verla".
La exposición está dividida de manera cronológica en tres grandes etapas. La primera, la etapa pionera (1867-1912) que explica los orígenes de la Arqueología en España, con los primeros estudios prehistóricos y la excepcional aportación de Sautuola, descubridor de Altamira. Aquí se pueden ver piezas como un cráneo enclavado encontrado a principios del siglo XX en Santa Coloma de Gramanet, la Dama del Cerro de los Santos del siglo III a.C. y la Corona de Recesvinto, la joya principal del más importante tesoro Europeo de la Alta Edad Media.
/cloudfront-eu-central-1.images.arcpublishing.com/prisaradio/TWEAKMPHRZKRNOLG5LVTXKB5CQ.jpg)
Corona de Recesvinto, perteneciente al tesoro visigodo de Guarrazar / J.J. Guillén
La segunda etapa que supone la consolidación de la arqueología moderna (1912-1960), con la profundización en los estudios de la arqueología prehistórica, además de la consolidación de la arqueología romana y los inicios de la arqueología medieval. Incluye piezas de los Tesoros de Villena y Caldas de Reis, el Toro Ibérico de Porcuna y el ajuar de la necrópolis Bonjoan.
Y la tercera etapa con la configuración de la arqueología contemporánea (1960-actualidad), que incluye los grandes hallazgos del Paleolítico y el significativo avance en los trabajos tanto de la arqueología romana como de la medieval, y en la que la arqueología pasa a ser considerada como una auténtica profesión. En esta última parte del recorrido se puede ver el pectoral de Carratiermes, la nueva Tabla de Osuna y el último hallazgo en 2016 de una figura descabezada de la catedral de Santiago de Compostela.
Para Ruiz Zapatero "la memoria material del pasado debería servir para que, de una forma libre y crítica, el ciudadano pueda empoderarse a través del conocimiento de su propia historia pero de la verdadera, nunca de historias sesgadas". La entrada es gratuita hasta el próximo 1 de abril.
