El Partido Popular ante las elecciones en Cataluña: ¿error o solución?
En las filas conservadoras algunos temen que con unos comicios la situación empeore. Otros piden mano dura a Rajoy. Y, por último, están los que defienden las elecciones convencidos de que así se rebajará la tensión entre el Estado y la Generalitat
Fachada de la sede del PP en Madrid.(EFE)
Madrid
No se hace más que hablar de elecciones en Cataluña. Hay quien cree que las puede convocar Carles Puigdemont, haciendo uso de su competencia, en el último minuto. Y si no muchos esperan que lo haga el Gobierno, tras la aplicación del artículo 155 de la Constitución.
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Pero en las filas conservadores no a todos les gusta que esta sea la salida para una de las mayores crisis institucionales de la democracia. Hay división de opiniones. Algunos cargos piensan que estos comicios supondrían "un error" porque, con ellos, "sólo se aparcaría el problema". Dan por hecho que los resultados serían muy similares a los de ahora. No ven que se alcance una mayoría alternativa en tan solo unos meses. De modo que, a su juicio, todo podría empeorar.
Además, están los que piden mano dura a Mariano Rajoy. Les parece que si, al final, el Ejecutivo da el paso, cualquier convocatoria electoral debería ir acompañada de medidas contundentes. Consideran que hay que aprovechar "la catarsis". De ese modo, abogan por intervenir desde los Mossos, a la educación, pasando por los medios de comunicación públicos catalanes. Sostienen que si los independentistas sigue teniendo el control, nada cambiará.
Frente a todas estas voces en contra, se elevan las de aquellos dirigentes populares que defienden las elecciones como la única vía posible. Confían en que los soberanistas se dividan y afirman que, al dejarlo todo en manos de las urnas, algo se rebajará la tensión entre el Estado y la Generalitat.
Ilegalización de partidos independentistas
En los últimos días, tanto Pablo Casado como Xavier García Albiol se han mostrado partidarios de la ilegalización de fuerzas políticas que promuevan la independencia. Pero desde Génova se encargaron ayer de subrayar que estas son "opiniones personales" y no la postura oficial del partido. "Afortunadamente en nuestro país lo que se condena y lo que lleva una respuesta judicial y política son los hechos. Uno se puede sentir como quiera. Independentista o no. Es uno de los grandes valores de nuestra democracia", dijo el coordinador general del PP, Fernando Martínez Maíllo, tratando de zanjar esta polémica.
En la sede nacional afirman que Puigdemont tiene "la última oportunidad para volver a la ley" y si no rectifica, habrá que aplicar el artículo 155. Los populares consideran que lo mejor es acabar "con esta incertidumbre cuanto antes". También señalan que el Gobierno está preparado y apuntan que las medidas se podrían activar por "por partes". Ahora unas y, si fuera necesario, más adelante otras. Aunque para darles el visto se tenga que volver a reunir el Senado.
