La Guardia Civil acusa a Mossos y Generalitat de contabilizar votos de colegios "cerrados"

Madrid

La Guardia Civil sigue investigando por orden judicial la actuación de los Mossos en el marco del referéndum del 1 de octubre. En el atestado policial que llegó a la Audiencia Nacional los agentes de la benemérita acusaban ya a la policía autonómica de "fragante inacción" a la hora de impedir la celebración del referéndum suspendido ya de forma definitiva por el Tribunal Constitucional.

Las actuaciones que sigue realizando la Guardia Civil podrían ser indicios sólidos de que hubo una connivencia entre los Mossos y la Generalitat para contabilizar en el recuento final votos de colegios que fueron presuntamente cerrados dando según la Guardia Civil apariencia de que se estaba cumpliendo el mandato judicial del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.

En sus diligencias a las que ha tenido acceso la Cadena SER la Guardia Civil contempla dos posibilidades: o los colegios no se cerraron como han dicho los Mossos, es decir la policía autonómica catalana mintió o se dejó votar, se contabilizaron los votos de este colegios y después se incautaron las urnas aparentando que se estaba cumpliendo con el mandato judicial.

Este informe de la Guardia Civil desmonta la versión que hasta ahora habían dado los Mossos. Según la policía autonómica el 1 de octubre impidió que se votasen en 99 colegios electorales y se incautó de más de 400 urnas distribuidas en 141 centros de votación. Ahora lo que dice la Guardia Civil es que de estos 99 colegios, en 50 de ellos la Generalitat incluyó los "síes" en su recuento.

Estos centros casi en su totalidad tienen menos de 1000 habitantes y  la mayoría  aparecen luego en el listado del escrutinio ofrecido por la Generalitat como lugares donde se votó mucho con un número de votantes equivalente e incluso superior al 100% del censo.

Por eso ante esta premisa la Guardia Civil establece dos conclusiones. La primera asegura que si es cierto que los Mossos cerraron 99 colegios es imposible que se produjesen votaciones con ese nivel de participación. La segunda acusa directamente a la Generalitat y a la policía autonómica de actuar en connivencia para celebrar la votación aunque la apariencia fue la de incautar urnas aparentando que se estaba cumpliendo el auto judicial.

Las diligencias concluyen subrayando que "hubo una actuación previamente acordada por los organizadores del referéndum y la cúpula de los Mossos para maquillar antes los jueces la actuación de los agentes y para que los organizadores del referéndum pudiesen incumplir las leyes".