Estrasburgo dictamina que grabar con cámaras ocultas viola la intimidad
El Alto Tribunal europeo ha resuelto la denuncia de cinco cajeras de supermercado de Sant Celoni y Sant Pere de Vilamajor que fueron despedidas por robar
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) condena a España a indemnizar por daños morales a las empleadas
Clive Rose (Getty Images)
París
La empresa identificada con las siglas M.S.A que utilizó cámaras ocultas para vigilar a sus empleados “violó el derecho a la vida privada y familiar. España deberá indemnizar con 4.000 euros por daños morales y entre 500 y 568,86 euros por gastos y costas a cada una de las cinco cajeras de supermercado de Sant Celoni y Sant Pere de Vilamajor. Se trata de Isabel López Ribalda, María Ángeles Gancedo Giménez, María del Carmen Ramos Busquets, Pilar Saborido Apresa y Carmen Isabel Pozo Barroso.
Los tribunales españoles, dicen los jueces de la Corte Europea de Derechos Humanos, "no alcanzaron un equilibrio justo entre el derecho a la privacidad de las demandantes y el derecho a la propiedad del empleador”. El supermercado en cuestión no había informado a sus empleados, como obliga la ley en España, sobre la colocación de todas las cámaras de videovigilancia.
Los jueces en cambio consideran que las empleadas, que fueron despedidas por robar, “tuvieron un juicio justo”, porque se utilizaron otras pruebas además de las imágenes registradas.
Las cinco solicitantes de amparo trabajaban como cajeras en una cadena de supermercados familiar. Sabían que se instalaron cámaras en la tienda para investigar posibles robos después de que el gerente notara pérdidas en existencias de entre 7.780 y 24.614 euros al mes. De otras cámaras, cuya ubicación no era visible por haberse instalado en lugares ocultos, no se informó a los trabajadores.
En 2009, todas las sospechosas, tras admitir su participación en los robos –después de visionar las imágenes registradas- fueron despedidas por razones disciplinarias. El contenido de los vídeos fue utilizado en los procedimientos de despido ante y los tribunales.
