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Zoido visita en África Occidental el despliegue "casi inoperativo" de la Guardia Civil por el mal estado de las patrulleras

Solo funciona una de las cuatro embarcaciones españolas desplegadas en Mauritania y Senegal en estos momentos, reconocen desde el Ministerio del Interior a la Cadena SER

Las patrulleras de la Guardia Civil anti cayucos, en su peor estado desde que fueron desplegadas en 2006

Una patrullera participó en una misión del Frontex sin el sistema de comunicaciones en regla, lo que supone "una ilegalidad y poner en riesgo la vida de los guardias", se quejan fuentes de la Guardia Civil

Varios agentes han sido enviados de vuelta a España "por la inoperatividad del servicio", según consta en informes internos a los que ha tenido acceso la SER

Fotografía facilitada por el Ministerio del Interior, del ministro del Interior español, Juan Ignacio Zoido (i), junto a su homólogo de Mauritania, Ahmedou Ould Abdalla (d), durante el encuentro que han mantenido en Nuakchot(EFE)

Madrid

El Ministro del Interior Juan Ignacio Zoido acaba de regresar de Mauritania y Senegal para reforzar los lazos en la línea de evitar la salida de migrantes hacia Canarias y para visitar a los integrantes del despliegue español en ambos países, que “está prácticamente inoperativo por falta de mantenimiento de las patrulleras y por decisiones al menos cuestionables”, denuncian fuentes conocedoras del destacamento español en ambos países.

Según ha podido saber la Cadena SER, tres de las 4 embarcaciones de la Guardia Civil desplegadas en estos dos países están declaradas oficialmente “inoperativas”, según un informe del General Jefe del Servicio Fiscal y de Fronteras. Además, de la única embarcación que funciona, sus credenciales están a punto de caducar al final de este mes.

Los patrulleros españoles desplegados desde hace casi 12 años para intentar evitar la salida de cayucos desde África Occidental hacia Canarias están además “con menos agentes que nuncadesde que fueron desplegados en 2006. Es la situación a día de hoy, tanto en Mauritania como en Senegal desde que en mayo de aquel año, que sigue siendo el del récord de llegadas de migrantes por mar a España (más de 35.000) fueron desplegados, en una operación sin precedentes, varios destacamentos del Servicio Marítimo de la Guardia Civil destinados a frenar la salida de cayucos con destino a Canarias. “Nunca habían estado tan mal las patrulleras y las tripulaciones, pareciera que quieren desmantelar el operativo “denuncian a la SER fuentes del servicio marítimo del Instituto Armado.

Esta es la misión estrella del servicio marítimo de la Guardia Civil en el exterior, de la que han presumido los ministros de Interior que han pasado por el cargo desde que se llegó la primera patrullera al puerto de Nuadibú en 2006. En la nota de prensa que anunciaba la visita de Zoido de ayer a Mauritania y Senegal para reunirse con representantes de ambos gobiernos se volvía a destacar su “eficacia”, afirmando que el viaje se realiza para reforzar las “excelentes relaciones bilaterales “y que “un ejemplo de esta colaboración y entendimiento es la presencia de un significativo contingente de miembros de la Guardia Civil y de la Policía Nacional en Nuadibú y Dakar, que colaboran de una manera estrecha y cotidiana con las fuerzas policiales de Mauritania y de Senegal... prueba de ello es que desde 2016 no ha llegado ninguna embarcación a Canarias procedente de Mauritania y el flujo masivo se logró parar en 2010”, se afirmaba en la nota.

Pero la situación es descrita de manera muy diferente por los que conocen de cerca el operativo. De hecho, los problemas han llegado a tal extremo, que con fecha 18 de diciembre, el General Jefe de la Jefatura Fiscal y de Fronteras comunicó a la sede central del Servicio Marítimo de la Guardia Civil en Madrid que anulaba la comisión de servicio de 6 agentes y oficiales que acababan de llegar a Senegal para hacer el relevo “por inoperatividad de las patrulleras de las patrulleras de Altura del destacamento marítimo de Senegal”, según le había comunicado el Coronel Jefe del Servicio Marítimo, tal y como aparece en uno de los informes internos a cuyo contenido ha tenido acceso la SER.

En ese informe se dice además que se envía de vuelta a España a ese grupo de guardias porque se desconoce la fecha en la que podrían volver a estar operativas esas patrulleras, por ello el Coronel Jefe del Marítimo suspende la comisión de servicios de esa tripulación que apenas estuvo un par de días en Dakar antes de ser enviada de vuelta, según confirman fuentes policiales españolas en Senegal.

Según fuentes del Instituto Armado conocedoras del despliegue español en estos dos países, “en Mauritania las dos patrulleras están inoperativas, una debería ser varada para repararla pero siguen sin hacerlo. En Senegal una está inoperativa porque tiene todos los certificados caducados y sin comunicaciones AM/FM. Estas son obligatorias, y tampoco funciona bien el teléfono vía satélite, averiado hace tiempo. El VHF también lleva tiempo mal. La otra patrullera está funcionando pero le caducan los certificados este mes y solo tiene VHF, todas las demás comunicaciones están averiadas” detallan distintas fuentes desde dentro del Servicio Marítimo de la Guardia Civil, a la Cadena SER.

"Patrulleras que incumplen la normativa española e internacional"

Uno de los casos más graves, según otro informe, es el de la Patrullera Río Guadalaviar, que según describe en los informes el Jefe del Destacamento en Dakar, realizó todos sus servicios hasta el día 23 de octubre “incumpliendo lo establecido en la normativa nacional e internacional , al objeto de salvaguardar el nombre de España y de la Guardia Civil, dentro de la operación HERA” y después añade el motivo “quedando inoperativa después de esa fecha al carecer de los certificados de navegabilidad, de seguridad de equipos, de seguridad de radio, de francobordo, del material náutico y del sistema anti incendios”, revela el informe .

Otra patrullera la Rio Ara también estaba inoperativa desde el mes de mayo hasta octubre, cuando las averías mecánicas fueron solucionadas pero no así los sistemas de comunicaciones reglamentarios que seguían sin funcionar. A pesar de ello fue usada en la operación Hera (en colaboración con la agencia europea de control de fronteras FRONTEX) sin que funcionaran “los equipos de comunicación VHF Y MF/HF “y se añade en el informe “siendo estos imprescindibles para la navegación”. El oficial asume en el informe que autorizó a usar la patrullera durante la semana que duró la Operación HERA porque "de haber continuado con la patrullera inoperativa el compromiso con la operación HERA no se habría cumplido, con una hipotética repercusión negativa para el nombre de la Guardia Civil y España", justifica el mando del servicio marítimo.

Fueron exactamente 8 días hasta que la patrullera, el 31 de octubre, vuelve a ser declarada inoperativa por el mismo oficial al mando del destacamento “por no tener forma de comunicarse por fonía y datos con otros barcos, estaciones costeras o torre de control de Dakar, así como tampoco tener garantías de poder avisos de emergencia, socorro y seguridad”. Es decir, se usó una patrullera sin los mínimos dispositivos de comunicación exigibles por la normativa de seguridad, “poniendo en peligro la seguridad de los guardias”, lamenta una fuente que pide el anonimato y que conoce bien el funcionamiento de estos destacamentos españoles en África Occidental.

En el informe interno de la Guardia Civil se señala que el 14 de diciembre se instalaron nuevas emisoras en ambas patrulleras pero seguían sin funcionar adecuadamente. Ambas patrulleras quedaron en “operatividad restringida a servicios vitales de mucha urgencia hasta que se les instale un GPS interno”, según el informe del jefe del destacamento en ese momento.

En Mauritania las dos patrulleras no se pueden sacar de puerto porque tienen caducados los certificados de la marina mercante. Una de ellas está pendiente del varado para la revisión que debería haberse realizado hace meses.

La mitad de los Guardias necesarios

Según describen estas fuentes especializadas, “la práctica parálisis del operativo” que volvía a visitar hace unas horas Zoido en Mauritania y Senegal, no solo se debe a falta de mantenimiento o de reparaciones técnicas, “tampoco se cumple con la mínima dotación y por eso discuten la falta de relevos decretadas por el coronel al mando del servicio marítimo”, explican.

En otra parte de estos informes internos, críticos con las decisiones de los superiores del servicio marítimo en Madrid, se describe que el mínimo para salir al mar a patrullar sería de 8 guardias por patrullera, “sin embargo ahora en Dakar hay 8 en total para las dos embarcaciones “, sin contar al jefe del destacamento y a dos enlaces, uno de ellos con la embajada. El próximo relevo, que se suele hacer cada 3 meses, está previsto para la semana que viene.

Además, el helicóptero de la Policía Nacional enviado a Dakar ha estado sin funcionar más de medio año. Según fuentes de Interior, acaba de ser reparado y puesto en funcionamiento de nuevo. El helicóptero forma parte del despliegue y ha estado todo ese tiempo inoperativo por problemas técnicos.

Interior reconoce que sólo hay una patrullera operativa pero que "el trabajo se sigue haciendo con eficacia"

Fuentes del Ministerio del Interior han asegurado a la Cadena Ser que los problemas técnicos de las patrulleras están en vías de solución “porque en los próximos días viajarán técnicos de las empresas correspondientes para proceder a las reparaciones” de las 3 embarcaciones que están inoperativas; las dos desplegadas en las costa de Mauritania y una de las dos que tienen como puerto base la capital de Senegal.

Es decir, reconoce Interior que actualmente solo puede patrullar una de las 4 embarcaciones españolas desplegadas pero que “esto no ha supuesto una merma para el servicio porque el trabajo se ha seguido haciendo con eficacia como prueba es que no llegan cayucos a Canarias desde 2016”, afirman estas fuentes oficiales. Sin embargo, hay registrada la llegada de al menos tres cayucos a Canarias durante el año pasado.

En el caso de Mauritania el departamento que dirige Zoido reconoce que no funcionan las dos patrulleras españolas, “pero se está haciendo el trabajo con las dos embarcaciones que en su momento cedió España al gobierno de Mauritania”, afirman estas fuentes gubernamentales que añaden que en ese país el destacamento “está al completo con los 25 guardias previstos” en el operativo.

En el caso de Senegal como solo funciona una patrullera, “eso hace que estén a la mitad de la dotación prevista de personal porque la otra está parada”, explica la misma fuente del Ministerio del Interior, que insiste en señalar en que “en todo caso no ha supuesto una merma del servicio”.

Sobre el hecho de haber llevado a cabo una misión de Frontex con la patrullera sin las mínimas comunicaciones o sobre la caducidad de los certificados de la marina mercante el Ministerio no ha respondido a las preguntas de la Ser por el momento.

 
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