La Guardia Civil analiza de nuevo el caso cerrado de la muerte de la hija de Ana Julia Quezada en Burgos en 1996
El Ministro del Interior ha confirmado la relación de la detenida con un caso "sobreseído", que se trataría de la caída de la hija de la detenida por una ventana en 1996
Madrid
El ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, ha comparecido en rueda de prensa con motivo de la firma del acuerdo para la equiparación salarial de Policía y Guardia Civil. Sin embargo, en el turno de preguntas por parte de la prensa, ha sido preguntado por el caso del fallecimiento de Gabriel Cruz.
Más información
- La Guardia Civil cree que Gabriel fue enterrado en un terreno de sus abuelos paternos
- La conversación telefónica de Ana Julia Quezada en su coche momentos antes de ser detenida
- La madre de Gabriel pide "que esto no acabe en rabia" y "no se hable" de la mujer detenida
- La investigación mantuvo abierta la línea del secuestro hasta el último momento
- La Guardia Civil encuentra el cadáver de Gabriel, el niño desaparecido en Almería
Sobre ello, Zoido ha confirmado que Ana Julia Quezada, la detenida y actual pareja del padre de Gabriel, "está relacionada con un caso que tuvo lugar en Burgos en 1996". La Cadena SER puede confirmar que este caso haría referencia a la caída de su hija de un balcón.
El caso, "quedó sobreseído", tal y como ha confirmado Zoido, ya que se consideró la caída como un accidente. "Ahora la Policía y la Guardia Civil son quienes tienen que analizar qué ha pasado y quienes tendrán que ir tomando las medidas que están previstas en relación a esto", ha comentado el ministro.
En relación a la autopsia, Zoido ha afirmado que los resultados llegarán "a lo largo del día de hoy" y que será la autopsia "la que determine de qué forma murió Gabriel", ya que "está decretado el secreto de sumario, así que no conozco detalles y si los conociera no podría decir nada", ha dicho el ministro.
Una vez más, Zoido ha aprovechado la ocasión para "solidarizarse" con la familia. Ha confesado que habló con la madre de Gabriel a lo largo del domingo tras conocerse la fatal noticia del fallecimiento del niño. "Hablé con la madre y le mandé un abrazo para Ángel (el padre), que estaba muy afectado".
Tras reconocer que ayer fue un día "muy duro", Zoido ha insistido en que no se puede explicar la muerte de un niño inocente de 8 años que tenía toda la vida por delante. También ha pedido que no se publiquen bulos y que nadie interfiera en las investigaciones que lleva a cabo la Guardia Civil, a la que ha felicitado por el trabajo realizado y por el "mimo y cariño" con los que ha tratado a la familia del pequeño.