Sociedad
Cambio horario

Todo lo que debes saber sobre el cambio de hora

En esta ocasión, toca adelantar los relojes una hora

A las 2:00 serán las 3:00 / Cadena SER

Madrid

¿Por qué cambiamos la hora? ¿De qué manera afecta a nuestro organismo? ¿A qué hora tengo que despertarme para que el cambio horario me afecte lo mínimo posible? Con el objetivo de dar respuesta a cada una de estas preguntas hemos confeccionado este artículo en el que, además de recordarte que tienes que cambiar la hora, también te contaremos un poco más acerca de esta tradición y de sus pros y contras.

La madrugada del sábado 24 al domingo 25, los relojes se ajustan al horario de verano. Por lo tanto, tendremos que adelantar una hora nuestros relojes: a las 2:00 horas serán las 3:00. ¿Qué supone este cambio? En primer lugar, una hora menos de sueño y una hora más de luz. Gracias a ello se hará de noche un poco más tarde.

¿Por qué adelantamos el reloj?

Con el objetivo de cumplir la directiva comunitaria 2000/84/CE, todos los estados miembros de la Unión Europea atrasan sus relojes para aprovechar mejor las horas de luz solar y consumir así menos electricidad. Según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía, esta medida supone un ahorro de cerca de 300 millones de euros, de los cuales 210 corresponden a los edificios del terciario y en la industria.

Los 90 millones de euros restantes que se ahorrarán durante este cambio de hora corresponden al potencial de los hogares españoles, lo que supone un ahorro de hasta seis euros por hogar. Por lo tanto, este cambio de hora busca el buen funcionamiento de sectores como la industria, los transportes y las comunicaciones.

Vale, bien, pero, ¿realmente funciona?

Muchos son los países de la Unión Europea que cuestionan el ahorro energético del cambio horario. De hecho, Finlandia presentaba el pasado mes de febrero una iniciativa en la Eurocámara mediante la que pedía el fin del cambio de hora. A pesar de no conseguirlo (384 votos contra 153 frenaron la iniciativa), otros países como Holanda, Alemania, Suecia, Francia o Bélgica también han mostrado sus dudas sobre la efectividad del cambio horario.

A pesar de la derrota de la iniciativa finlandesa, el Parlamento Europeo se comprometía a estudiar si acaba con el cambio de hora. Mientras tanto, el país escandinavo recuerda que los beneficios en ahorro energético son demasiado pequeños en comparación con los problemas que puede provocar a la salud de los ciudadanos.

Ah, que el cambio de hora es malo para la salud...

Bueno, no todas las personas reaccionan de la misma manera al cambio de hora. Mientras que algunos no registran ninguna anomalía en su organismo, otros sufren síntomas como alteraciones en el sueño, en el apetito, una mayor irritabilidad e incluso leves cuadros de ansiedad. Por esa misma razón, es probable que durante estos días te sientas más cansado de lo habitual o te cueste concentrarte.

Según explica el director médico de telemedicina del Instituto DKV Ferrán Tognetta, el cambio de organismo está relacionado con el reloj biológico del cerebro. Dado que el cerebro cuenta con un reloj biológico que va ajustado a un ritmo de cuatro horas, un cambio horario provoca que el reloj tenga que ajustarse, provocando así los síntomas anteriormente detallados.

Y entonces, ¿por qué lo hacemos?

¿Otra vez? Por el ahorro energético. Y bueno... por costumbre. Este cambio, que empezó a generalizarse a partir de 1974 en toda Europa, se aplicó como directiva desde 1981. A partir de aquel año, todos los países de la Unión Europea adelantan o atrasan su hora dependiendo de la fecha. Pero no somos solo nosotros.

Se estima que la madrugada de este sábado al domingo un total de 70 países cambiarán su hora. Más de 1.500 millones de personas, sobre todo en el hemisferio norte. Mientras tanto, en la zona ecuatorial no se lleva a cabo ningún cambio puesto que el número de horas de sol diarias es similar durante todo el año. Mientras que la mayoría de países adelantará una hora sus relojes, en regiones como la isla de Lord Howe de Australia, por ejemplo, se llevará a cabo un cambio de media hora. 

Entiendo... ¿y qué puedo hacer para que el cambio horario me afecte lo mínimo posible?

Dormir bien. Sencillo, ¿verdad? Nada como un buen descanso para comenzar el día con energía. Si quieres que el cambio de hora te afecte lo mínimo posible, una calculadora de ciclos de sueño te ayudará a descubrir, en cuestión de segundos, el momento en el que tienes que despertarte para que el reloj biológico tenga el tiempo suficiente para reajustarse.

Se estima que el cuerpo humano necesita entre cuatro y seis ciclos de sueño para descansar por completo. Cada uno de estos ciclos está dividido en un total de cinco etapas: desde la etapa del adormecimiento hasta la fase REM. Para despertarse de la mejor forma posible, es importante despertarse en la parte final de la etapa REM o al inicio de la primera etapa del sueño del próximo ciclo. Mientras tanto, se recomienda no despertar entre las etapas 3 y 4. Gracias a ello conseguirás evitar los síntomas producidos por el cambio horario.

Oye, última pregunta... el móvil, el ordenador... ¿hay que cambiarlos de hora?

Seguro que en anteriores cambios de horario te habrás preguntado si el móvil se ha actualizado por sí mismo, ¿no es así? Bueno, pues, a no ser que hayas configurado tu teléfono móvil para hacer el cambio de hora de forma manual, este cambiará de hora por sí mismo.

Aquellos teléfonos con la función "zona horaria automática" activada cambiarán por arte de magia la madruga del sábado a domingo. Bueno, de la magia, y del sistema global para las comunicaciones móviles, el también conocido como GMS. La red telefónica tiene configurada la hora para que en el momento de encender el teléfono ya tengas la hora actualizada.

David Justo

David Justo

(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en tecnología y buscador de historias virales e inverosímiles...

 
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