Ciudadanos, hacia las elecciones que pueden otorgarles los primeros gobiernos
El partido de Rivera quiere dejar de ser el bastón de apoyo en aquellos territorios donde tienen representación
La dirección del partido trata de “enfriar” el debate de los candidatos
Madrid
El escándalo del ‘caso Cifuentes’ y las últimas encuestas de opinión han sido el acicate definitivo para que Ciudadanos haya activado ya su estrategia electoral de cara a los comicios de 2019. El objetivo principal que se marcan en Alcalá 253 es doble: por un lado, pasar de ser el sustento de algunos ejecutivos autonómicos y municipales para ser el partido que gobierne. Pero, por otro, Ciudadanos se marca otra gran ambición y que no es otra que lograr representación en aquellos parlamentos o ayuntamientos donde ahora no la tienen.
Madrid, el gran objetivo
La “caída” de Cristina Cifuentes es para Ciudadanos el fin de la legislatura en la Comunidad de Madrid. Lo que hay ahora es un “gobierno interino”, insisten los líderes más cercanos a Albert Rivera. Es el primer paso para “dejar morir” a un agonizante PP en las encuestas. Una de las últimas, publicada a finales de abril por El País y realizada por la empresa Metroscopia, señala que si hoy hubiera elecciones el PP caería hasta el tercer lugar pasando de 48 escaños a 25 y Ciudadanos subiría desde los 17 sillones actuales a los 48, siendo el partido ganador aunque obligado a pactar por no obtener la mayoría suficiente. Tras el ‘escándalo Cifuentes’ El golpe ya es “lo suficientemente grande” que a duras penas el PP “podrá remontar”, aseguran en el partido de Rivera. Otra cosa será quién dará la batalla como cabeza de lista. En la dirección de Ciudadanos están “muy satisfechos” con el trabajo realizado por Ignacio Aguado al frente del partido en la Asamblea de Madrid. Sin embargo, las fuentes consultadas no descartan que haya “otras candidaturas” cuando en enero de 2019 se celebren las preceptivas primarias y que, en la dirección dicen que “respetarán”.
La situación en el Ayuntamiento de Madrid “es diferente” ya que aquí gobierna actualmente la izquierda. Sin embargo, Ciudadanos también cree que la formación podrá conseguir el bastón de mando. Las encuestas que manejan también reflejan una mayoría de concejales aunque muy seguidos de Ahora Madrid. Como en el caso de Aguado, la dirección de Ciudadanos tampoco descarta que haya “otros candidatos” diferentes a Begoña Villacís.
Barcelona, el experimento Valls
En Cataluña, el partido de Rivera está en horas buenas después de que Inés Arrimadas lograra llevar a los naranjas a ganar las elecciones al Parlament en 2017. Sin embargo, las cosas están cambiando mucho en el caso de la capital catalana. El pasado 20 de abril, el que fuera primer ministro de Francia, Manuel Valls, desveló en una entrevista en TVE que “se estaba pensando” ser el candidato a la alcaldía de Barcelona por Ciudadanos. Con “orgullo” dijo sentirse Albert Rivera tras confirmar las conversaciones entre ambas partes porque “es una persona con prestigio y talento”. Sin embargo, días después, Valls dijo en una entrevista en Catalunya Ràdio que si se presenta será “en una plataforma abierta y con la posibilidad de contar con otros partidos”. Ahora Ciudadanos, que no quiere perder a Valls como ‘as en la manga’, trabaja en buscar una fórmula donde exista esa apertura a otras fuerzas.
Andalucía, el primer gran asalto
Antes de los comicios autonómicos, locales y europeos de mayo vendrán las elecciones al Parlamento de Andalucía. En Ciudadanos son conscientes de lo complicado que resultará arrebatar el primer puesto al ”todopoderoso e histórico” PSOE andaluz. Pero la formación de Rivera asegura que “echará el resto” para conseguir que su partido llegue a gobernar en Andalucía. Y una de las estrategias que van a seguir es incorporar a Inés Arrimadas a la campaña electoral. No sólo porque ha ganado en Cataluña sino también porque Arrimadas presume de ser andaluza, de Jerez de la Frontera para más señas.
Allí donde Ciudadanos ha pactado con el PP
Los de Albert Rivera tienen un claro objetivo en aquellas comunidades donde han pactado, fundamentalmente con el PP, y no son parte de su gobiernos: ser la primera fuerza política. Ocurre no sólo en Madrid, sino también en Murcia o en Castilla y León. Rivera “vende” como suyos muchos de los logros conseguidos gracias a los pactos y eso le da oxígeno para poder contar en todas esas regiones que el supuesto progreso alcanzado también es por el trabajo de Ciudadanos.
Otra cosa bien distinta son los territorios donde Ciudadanos no tiene representación e incluso, como es el caso de Euskadi, ni siquiera tienen infraestructura. El objetivo es conseguir entrar en parlamentos como el de Galicia, Canarias o Castilla-La Mancha, entre otros para”consolidar un proyecto”.
Los candidatos, el debate "que no toca ahora"
La dirección de Ciudadanos insiste en que el debate de los candidatos “no toca” de momento, pero lo cierto es que fue el propio presidente de la formación el que lo sacó cuando ante los suyos el pasado 21 de abril en El Escorial les anunció que, aparte de Valls, llegarían a Ciudadanos “más independientes” porque son “el talento” que necesita el partido. El anuncio generó inquietud entre muchos de los que llevan años en la batalla diaria y por eso la dirección se apresuró en aclarar que la mayoría de esos independientes “no encabezarán” las listas, sino que irán en puestos intermedios “para completar el proyecto”. En cualquier caso, los colaboradores de Rivera insisten en que sobre todo eso estarán las elecciones primarias que serán en enero y donde “la militancia tendrá la última palabra”.
Óscar García
Licenciado en Ciencias de la información y periodista de Cadena SER desde hace 20 años. Ha desarrollado...