Cuándo y cómo será la cuarta moción de censura de la democracia
Rajoy sólo logrará mantener el Gobierno si reedita la mayoría que le ha permitido aprobar los presupuestos esta semana con Cs, PNV y los partidos canarios
La Mesa del Congreso calificará el lunes la iniciativa del PSOE y se abre un plazo mínimo de dos días para presentar mociones con otros candidatos alternativos. Ana Pastor decidirá la fecha del debate, para lo que no hay un plazo máximo, tras sondear a los grupos y la agenda del Gobierno
Para que prospere la censura se necesita mayoría absoluta de al menos 176 diputados. La cifra sólo se consigue si Ciudadanos se suma o con una mayoría alternativa en la que Sánchez logre el respaldo de Unidos Podemos, ERC y PDCat, PNV, Compromís y Bildu. Si los nacionalistas vascos no apoyan la moción, Pedro Sánchez necesitaría sumar a los dos diputados canarios y Ana Oramas, de Coalición Canaria, ya ha mostrado su rechazo inicial
Los letrados del Congreso confirman que desde el registro de la moción de censura queda bloqueada la posibilidad de disolver las Cortes y convocar elecciones hasta la celebración efectiva del debate
Si la moción prosperara antes de que concluya la tramitación del presupuesto en el Senado y las cuentas entren en vigor el 1 de julio sería el Gobierno de Pedro Sánchez el que tendría que gestionar las cuentas diseñadas por Rajoy hasta la presentación de un nuevo presupuesto
Madrid
Por segunda vez en esta legislatura, el Congreso de los Diputados debatirá una moción de censura a Mariano Rajoy. Tras la presentación hoy de la iniciativa del PSOE en el registro de la Cámara, la maquinaria reglamentaria de las previsiones constitucionales se ha puesto ya en marcha en el Congreso de los Diputados. El siguiente trámite es que la Mesa del Congreso califique y tramite el próximo lunes la iniciativa tras confirmar que reúne los requisitos formales para ello. A partir de ese momento se abrirá un plazo de 48 horas para la presentación de mociones con candidatos alternativos.
El reglamento del Congreso y la Constitución establecen que el plazo mínimo para debatir la moción es de cinco días si bien no hay un plazo máximo para ello. Es competencia de la presidenta de la Cámara, Ana Pastor, fijar la fecha concreta. En el caso de la última moción de censura de Unidos Podemos, transcurrieron 24 días entre el registro de la iniciativa y la celebración del debate. Fuentes parlamentarias dan por hecho que Pastor tomará la decisión tras sondear a los grupos (se ha adelantado al lunes la Junta de Portavoces) y en particular al PSOE, promotor de la moción y al Gobierno para tener en cuenta el calendario y los posibles compromisos internacionales del Ejecutivo.
Para que prospere la moción de censura se necesita mayoría absoluta, 176 escaños. Si Ciudadanos no se suma, el PSOE puede lograr esa cifra con dos posibles combinaciones. Por un lado, sumando a Unidos Podemos, ERC, PDcat, Compromís, Bildu (todos ellos se han mostrado abiertos y dispuestos a apoyarla) y el PNV, que de momento ha evitado pronunciarse a la espera de reunirse con Sánchez y estudiar con detenimiento la propuesta.
En el caso de que el PNV rechazara la moción, aún habría otra posible aritmética parlamentaria para que prosperara, que Pedro Sánchez sumara con Unidos Podemos, partidos catalanes, Compromís, Bildu y también con los dos diputados canarios que acaban de aprobar los presupuestos con el PP, Pedro Quevedo (Nueva Canarias) y Ana Oramas (Coalición Canaria). Ésta última ya ha manifestado su rechazo a apoyar una moción sumándose al voto de Bildy y los independetistas catalanes.
Un panorama endiablado en el que cuenta hasta el último voto y en el que, a priori, el PP sólo podría mantener el Gobierno si reedita la misma mayoría con la que esta semana ha logrado dar luz verde a los presupuestos. En cualquier caso, la aprobación definitiva de las cuentas aún depende de la tramitación del Senado y la ratificación final en el Congreso, prevista para la última semana de junio, de modo que si la moción de censura prospera sería otra mayoría política con Pedro Sánchez de presidente el que tendría que gestionar esas cuentas diseñadas por Mariano Rajoy, hasta la aprobación de un nuevo presupuesto.
Tras una mañana de intensas consultas en el Congreso, los letrados de la Cámara han concluido que desde el mismo momento del registro de la moción de censura queda bloqueada la posibilidad de disolver las Cortes y convocar elecciones hasta la celebración efectiva del debate. Si la moción de censura prosperara, Pedro Sánchez como presidente del Gobierno podría convocar elecciones sin restricción de fecha (-con la única reserva constitucional de los 54 días que fija la Carta Magna entre la disolución de las Cortes y la celebración de los comicios).
Será la cuarta moción de censura de la democracia, la segunda en apenas un año para intentar desalojar a Mariano Rajoy de la Moncloa.