Cine y TV
Análisis

La confirmación de un secreto a voces en nuestra televisión

'Supervivientes 2018', el reality de Telecinco comandado por Jorge Javier Vázquez y Lara Álvarez, cerró su última temporada logrando el share más alto de su historia y es la prueba de que la televisión tradicional está muy viva en España

Jorge Javier Vázquez, presentador de 'Supervivientes' / Mediaset España

Madrid

Que los consumos han cambiado. Que ya no funciona nada. Que la tele, tal y como la conocíamos, ha muerto. En todo esto hay algo de verdad, pero también una intención de beneficiar a los nuevos operadores. La televisión tradicional se las está viendo canutas para que sus programas y series de prime time lleguen a un amplio espectro de la audiencia. Pocos contenidos resultan atractivos para un público cada vez más selectivo que poco a poco se está dejando conquistar por los gigantes del streaming.

Los consumos están cambiando. Eso es así. ¿Pero no pueden convivir los dos modelos? Muchos son los que están empeñados en hacernos ver que Netflix, HBO y compañía son el futuro, la única alternativa, dejando a la televisión tradicional como una cosa del pasado.

Luego llega un reality como Supervivientes y se ventila de un plumazo todas esas teorías conspiratorias, dejando claro que la televisión lineal, la de toda la vida, está muy viva.

En los tiempos que corren es complicado que una serie o un programa alcance los 3 millones de espectadores. Las cadenas principales sudan la gota gorda para mantener en prime time unos índices de audiencia por encima de los 2 millones y unas cuotas de pantalla lo suficientemente competitivas.

Mucho tienen que ver los nuevos hábitos adquiridos por el público, que prefieren elegir cómo, cuándo y dónde ver los contenidos en lugar de tragarse una emisión en horario de máxima audiencia, con su correspondiente publicidad, que fácilmente puede acabar pasada la 1 de la mañana. ¿Pero no será también que la oferta no resulta del todo interesante?

'Supervivientes', el fenómeno del año

Sí ha interesado Supervivientes, que después de 17 ediciones se ha convertido este 2018 en el auténtico fenómeno de la temporada al registrar el mejor share de su historia (28,9%) y acumular casi 3,2 millones de espectadores, su mejor registro de las tres últimas ediciones.

Además, como la demanda era alta, la oferta también tenía que serlo. De ahí que Mediaset ampliara este año la franquicia de Supervivientes ofreciendo tres entregas por semana, a veces, hasta cuatro. Una extraordinaria cobertura del concurso que se traducía después en unas grandes audiencias: Supervivientes: tierra de nadie (23,4% y 2.787.000), la emisión de los martes, se ha convertido en el segundo espacio más visto de la temporada; mientras que la de los domingos, Supervivientes: Conexión Honduras (19,8% y 2.656.000), ha batido su récord histórico en espectadores con el mejor share desde 2011.

Le pese a quien le pese, Supervivientes ha sido el éxito del curso 2017/2018, el azote de la competencia y la prueba irrefutable de que la televisión lineal sigue siendo atractiva para todo tipo de públicos. Solo hace falta saber darle a la tecla adecuada.

 
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