Bandos en el PP: llegan los apoyos públicos para sus candidatos
Los populares se van mojando. Se dividen entre Sáenz de Santamaría y Cospedal mientras Casado lo aprovecha para presentarse como la única persona capaz de no romper el partido
Los candidatos a presidir el Partido Popular, María Dolores de Cospedal y Pablo Casado, durante la presentación de avales, en la sede del partido en Madrid. / J.J.Guillen (EFE)
Madrid
Los Consejos de Ministros de Mariano Rajoy siempre estuvieron divididos entre los partidarios y los detractores de Soraya Sáenz de Santamaría. En el PP negaron continuamente la situación, pero este miércoles esta se constató. Se comprobó en cuanto los cargos populares comenzaron a retratarse.
Ahora, en la guerra interna por el poder conservador, todos se van posicionando. Comienzan a llegar los apoyos públicos. La foto de la exvicepresidenta entregando sus avales en Génova fue todo un ejemplo. Allí estaban el exjefe de gabinete de Rajoy, José Luis Ayllón. Pero también los exministros Fátima Báñez y Alfonso Alonso. Además, desde Santander compareció el extitular de Fomento, Íñigo de la Serna, para dejar claro que él no se presentaba e iba con ella.
Aunque la sorpresa se la llevaron muchos con Pablo Casado. En el PP piensan que cuenta con los avales de José María Aznar y Esperanza Aguirre. Aunque no fue eso lo que chocó en sus filas. Lo que llamó la atención de los suyos fue que apareciera junto al vicesecretario Javier Maroto y José Ignacio Echániz, exconsejero de Castilla- La Mancha con María Dolores de Cospedal.
La secretaria general del PP, -quien no sabe si podrá dimitir de su cargo porque, con ello, puede generar un problema jurídico- se presentó en la sede nacional con una serie de militantes desconocidos. Eso sí, antes el presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, había salido a respaldarla. También lo hizo el exministro Rafael Catalá.
Además, Cospedal decidió nombrar a la exministra de Sanidad, Dolors Montserrat, su portavoz. De tal forma que esta se estrenó en el puesto anunciando que el primer acto de campaña sería en Cataluña. Un detalle que en las filas populares no pasó desapercibido. Algunos pensaron que lo hacía para diferenciarse así de Sáenz de Santamaría y su criticada 'Operación Diálogo'.
Con la exvicepresidenta también están los exministros Álvaro Nadal y Cristóbal Montoro. Y junto a Cospedal, Isabel García Tejerina o Juan Ignacio Zoido. Se van formando bandos. Algo que Casado supo ayer aprovechar al venderse como la única persona capaz de mantener unido al PP.
Además, Casado exhibió músculo. Acudió al PP presumiendo de que había logrado recabar más de 5.000 avales en tan solo 48 horas, aunque realmente se presentó con menos y su equipo tuvo que explicar que el resto iría llegando del resto de sedes. Por su parte, Cospedal entregó más de 3.000 y Sáenz de Santamaría no quiso desvelar su cifra. Y, de este modo, se completó la primera fase de este proceso. Ahora toca hacer campaña. Hasta el sábado no comienza, aunque Casado, al más puro estilo Pedro Sánchez, ya empieza a visitar hoy territorios.
Todos se van de tournée por España hasta el 5 de julio, fecha en la que votaran los militantes. Si respaldan abrumadoramente a un candidato, acabará el debate. Pero se han postulado tantos, que en Génova ven la situación reñida y, por eso, piensan que las dos candidaturas, con más apoyos, serán las que pasen a la final. Será en el Congreso Extraordinario que se celebra en Madrid los próximos 20 y 21 de julio donde, la última palabra le corresponderá ya a los compromisarios quienes están más controlados por las direcciones provinciales del PP.
