La recuperación económica no se refleja en las subidas salariales
Según los datos del Instituto Nacional de Estadística solo subieron los sueldos de los funcionarios
Madrid
Los datos positivos de crecimiento económico de los últimos años crearon una esperanza para una ciudadanía asfixiada por los recortes producidos en los años más duros de la crisis. Sin embargo, las subidas de los años 2014 y 2015 se han destruido con la bajada del 1,3% en el 2016, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
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El organismo ha lanzado su tercer Índice de Precios del Trabajo (IPT), un indicador que analiza la evolución de los salarios sin verse afectados por los cambios en la calidad y cantidad de trabajo realizado. Los últimos datos reflejan una bajada del 1,3% en 2016, de manera que se pierde la subida acumulada en los años 2015 (0,7%) y 2014 (0,8%). Además, hay que sumar la pérdida de poder adquisitivo de 1,1 puntos, es decir, con el mismo sueldo compramos menos cosas.
La brecha salarial se incrementó en el 2016, ya que los hombres vieron reducidos su salarios un 0,7% y las mujeres un 2,2%. Si lo dividimos por edades, los jóvenes (menores de 25 años) han sido los grandes perjudicados con una disminución del 5,3%.
La administración pública, la única que sube
Dependiendo del sector económico, algunos trabajadores se han visto más afectados que otros. Los más perjudicados han sido los informadores y comunicadores, con un descenso del 3,6%. La educación y las actividades inmobiliarias son los otros dos sectores en los que más se han recortado los sueldos, con un 3,1% y 3%, respectivamente.
Los únicos que han visto incrementado su salario son los trabajadores de la administración pública, con un aumento del 1,7%. Algo que desde el INE achacan a "la devolución de parte de la paga extra eliminada en diciembre de 2012".
Aquellos trabajadores que tenían contrato temporal sufireron una redución de salario seis décimas mayor que los empleados indefinidos. Peor aún les fue si realizaban su trabajo en una empresa pequeña, las cuales redujeron los sueldos trés decimas más que la media y cuatro más que una empresa mediana o grande. Si encima tenían una antiguedad menor a tres años, la bajada fue del doble que la media.
Por lo tanto, podemos decir que el perfil de empleado más castigado fue una joven mujer periodista que trabajaba en una empresa pequeña con un contrato temporal y una antiguedad menor a tres años. Por otro lado, el más beneficiado fue un hombre funcionario con mucha antiguedad en una gran administración.