El Atlético acaba con el Huesca y ya mira al derbi

El Atlético de Madrid volvía al Metropolitano para enfrentarse al Huesca en un inicio de temporada inestable para el equipo del ‘Cholo’. El entrenador ya ha tenido que escuchar algún amago de silbido por parte de su leal afición por el flojo inicio de temporada y espera remontar los primeros resultados para no perder coba con la cabeza de la Liga, comandada por el FC Barcelona y el Real Madrid. Lo que más les urgía a los rojiblancos era resolver el problema del gol, ya que era el inicio de Liga con menos goles de la ‘era Simeone’.

El Huesca por su parte llegaba en un momento complicado a pesar de que están compitiendo cada partido. Tres derrotas consecutivas dejaban en crisis al equipo de Leo Franco que aún así les mantenía fuera del descenso gracias a los cuatro puntos logrados en las dos primeras jornadas. Era la primera vez que ambos equipos se enfrentaban en la historia.

El Atleti, que jugaba sin Saúl y con Carlos Isaac en el once, empezó intentando hacerse con el control del balón sin éxito en los primeros minutos. El Huesca estaba bien colocado en el campo y el control del balón estuvo repartido al principio del encuentro.

Griezmann abre el marcador

El guion se mantuvo durante los primeros quince minutos, hasta que los locales abrían la lata. Una gran jugada del Atlético con triangulación incluía finalizaba con un gran pase de Costa que acababa en los pies de Griezmann, que empujaba el balón y hacía el primero del encuentro. El francés además sumaba un nuevo récord e igualaba a Agüero marcando a 24 equipos distintos con la camiseta del Atlético. El único que estaba por delante era Fernando Torres con 31.

El equipo de Leo Franco no se aminaló e intentó hacer el empate a la contra. La defensa del Atlético estaba bien cerrada y no concedía ocasiones claras, pero los visitantes cada vez se acercaban más a la portería rival y obligaban a los de Simeone a dar un paso atrás.

El Atleti sentencia antes del descanso

Fue solo un espejismo. El Atlético recuperó poco a poco el control del partido, y a través de Thomas hizo el segundo en el marcador. El francés realizaba desde fuera del área un tremendo disparo raso en el que nada pudo hacer Werner. Los locales asestaban un hachazo al partido antes del descanso para alegría del Metropolitano que se divertía viendo el partido.

No era para menos. Koke metía un centro al área, Correa no remataba, pero el balón acababa dentro. En un inicio fue anulado por fuera de juego, pero el VAR concedió el gol al Atlético, que hacía dos goles casi consecutivos y el tercero del partido para prácticamente sentenciar el partido antes del descanso.

El resto de la primera mitad aumentó el dominio de los locales, aunque sin más goles. La única novedad fue la retirada de Giménez lesionado (peligra el derbi), por Lucas Hernández. Con 3-0 el partido llegaba a un descanso muy necesario para el Huesca.

Segunda parte de transición

Al descanso Leo Franco introdujo a Aguilera por el Cucho Hernández. El cambio, con perfil defensivo, pretendía frenar la sangría ofensiva de los locales. Aun así, el balón fue controlado desde el principio por los locales, que manejarían los primeros compases de los segundos 45 minutos de encuentro.

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Los minutos transcurrían sin novedad en el marcador. El Atleti se dedicaba a dejar pasar los minutos ante un Huesca que daba la sensación de que quería estar en cualquier sitio menos en el Metropolitano. Griezmann se retiraba con la mente puesta en el derbi y Simeone daba entrada a Kalinic. Hacía lo mismo minutos después con Gelson Martins, retirándose Diego Costa. Leo Franco también movía el banquillo sin mucha convicción, y hacía entrar a Chimy Ávila por Longo. También se marcharía un lesionado Luisinho por Akapo.

Ninguna entrada varió el ritmo del encuentro. El Atlético, con la mirada y la mente puesta en el derbi del sábado frente al Real Madrid, se dedicó a dejar pasar los minutos y a hacer bueno el resultado de la primera mitad. Los del ‘Cholo’ se recuperaban del inicio de Liga y volvían a tener buenas sensaciones en el momento oportuno. Los rojiblancos dormirían a tres puntos de la cabeza y con toda la semana para encarar el partido del Santiago Bernabéu. El Huesca por su parte se hundía tras la cuarta derrota consecutiva y con un partido discreto que le metía un poco más en la zona baja de la clasificación.