Las elecciones de mitad de mandato que determinarán la presidencia de Trump
El presidente de Estados Unidos se ha volcado en la campaña aunque él no se presenta
Estos comicios se entienden como un plebiscito a su mandato
Washington
Millones de personas irán a las urnas el próximo martes y decidirán un nuevo panorama político que condicionará la presidencia de Donald Trump y el futuro del país. Los resultados de estos comicios legitimarán su administración y reforzarán su poder hasta 2020 o se lo quitarán en favor de los demócratas, dificultando mucho lo que queda de presidencia.
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En las elecciones de mitad de mandato se renueva toda la Cámara de Representantes (435 escaños) y un tercio del Senado (35 de 100 escaños). También se eligen gobernadores en 36 de los 50 Estados y alcaldes en decenas de ciudades del país, entre ellas la capital, Washington D.C.
Los republicanos controlan actualmente las dos cámaras. En el Senado, los demócratas necesitan 51 escaños para recuperar la mayoría (actualmente tiene 47 a los que suman dos independientes) pero de los 35 en disputa solo 9 están en poder de los republicanos. Según la mayoría de las encuestas, los conservadores mantendrán una estrecha mayoría en la Cámara Alta.
Es en la Cámara de Representantes donde puede haber un vuelco, según los sondeos. De los 435 asientos, los republicanos tienen 241 y los demócratas 193. Es decir, el partido azul necesitará sumar 25 escaños si quiere recuperar la mayoría. Esto determinaría la segunda etapa de la presidencia de Trump porque la oposición tendría la capacidad de bloquear la agenda legislativa, ya que todas las leyes tienen que ser ratificadas por ambas cámaras.
La tendencia histórica de estos comicios es que el partido que tiene la presidencia durante las elecciones de mitad de mandato, pierde poder en las cámaras. Ha ocurrido en 35 de las últimas 38 midterms. El partido Demócrata perdió las dos cámaras en 2014 a pesar de que Barack Obama tenía en ese momento una popularidad del 45%. Trump tiene la popularidad más baja que un presidente ha tenido a estas alturas de mandato, ronda el 42%. Sin embargo, las estadísticas también dicen que el índice de popularidad del presidente no tiene por qué determinar el resultado. En 1998, los demócratas consiguieron mantener la mayoría en la Cámara a pesar de la impopularidad que le trajo a Bill Clinton el impeachment por el escándalo Lewinsky.
La sombra del impeachment persigue a Trump desde el inicio de su legislatura y, con una mayoría demócrata en la Cámara, estará más presente que nunca. Este hemiciclo tiene la capacidad de iniciar un juicio político al presidente si la investigación que el fiscal especial, Robert Mueller, está llevando acabo sobre la trama rusa revela delitos graves. Sin embargo, para que el impeachment prospere, necesita ser aprobado también por una mayoría de dos tercios del Senado; requeriría votos republicanos incluso si los demócratas ganaran todos los escaños disponibles la semana que viene, algo que –al menos a estas alturas- parece improbable.