Los partidos apuran la negociación para renovar el CGPJ
El PP plantea la posibilidad de prorrogar el plazo y extender las negociaciones hasta principios de diciembre. El gobierno y el PSOE quieren que el acuerdo se cierre este lunes
ANGEL DIAZ (EFE)
Madrid
El plazo oficial para presentar la lista de los diez vocales del Consejo General del Poder Judicial elegidos por el Congreso termina a las ocho de las tarde de este lunes. El PP quiere jugar una nueva baza, la de los tiempos y por eso plantea la posibilidad de prorrogar las negociaciones hasta principios de diciembre. Esta posibilidad sería factible si el PSOE quisiera y ambos partidos lo solicitasen a la mesa del Congreso, como ya ocurrió en dos ocasiones anteriores.
Sin embargo, fuentes del grupo socialista, argumentan que los letrados de la cámara ya advirtieron hace una semana que el plazo "constitucional" termina este lunes.
El periodista Ernesto Ekaizer apunta en Twitter que Pedro Sánchez y Pablo Casado han pactado que el candidato para suceder a Lesmes sea Manuel Marchena, actual presidente de la Sala Segunda del Tribunal Supremo.
Perfiles que representen a la sociedad
En el PSOE muestran su predisposición al acuerdo y recuerdan que buscan perfiles que representen a la sociedad actual. Además quieren abrir paso a Unidos Podemos, al que proporcionalmente, por el número de escaños que tiene en el congreso (junto con sus confluencias) le correspondería elegir a cuatro vocales.
Los de Pablo Iglesias quieren participar en el proceso de selección pero no les gustan las reglas del juego, es decir, el sistema por el que se elige a los vocales. El propio Iglesias ha dicho este fin de semana que sería bueno que todos las fuerzas políticas se pusieran de acuerdo para que no haya jueces de partido y que se primasen los criterios profesionales.
El desmarque de Ciudadanos
Quien se ha desmarcado por completo de este proceso es Ciudadanos. En el partido de Albert Rivera aseguran que no va a participar "en el pasteleo del bipartidismo" al que ahora también se suma Podemos para que a los jueces los sigan nombrando los políticos. Entienden que se están repartiendo los jueces como si fueran cromos e insisten en que no son las ejecutivas de los partidos las que tiene que debatir sobre este asunto.
Recuerdan su propuesta para la despolitización del Poder Judicial que pasa por que sean los jueces los que elijan a su órgano de gobierno, limitar a dos los mandatos, eliminar las puertas giratorias entre política y justicia y primar el concurso de méritos público, basado en la antigüedad, la especialización y la evaluación continua, entre otras medidas.
Los nacionalistas vascos y catalanes también se mantienen al margen de este proceso. Nos dicen que nadie les ha llamado, no han participado en la negociación y por lo tanto van a mantenerse como meros observadores.
