Comienzan los trabajos de prospección en el Yacimiento de la Laguna del Acequión en Albacete
Si los restos arqueológicos se encuentran en buen estado, el Ayuntamiento quiere poner en marcha un centro de interpretación y habilitar la zona para recibir turistas. Antes tendrán que negociar con la familia propietaria de los terrenos
Albacete
Esta semana han comenzado los trabajos de prospección y georadar en el Yacimiento de la Laguna del Acequión. Un grupo de investigadores de la Universidad de Cádiz está analizando el terreno, para saber, sin tener que excavar, si quedan restos arqueológicos suficientes y en buen estado como para poner en marcha un proyecto que incluya un centro de interpretación y hasta un parque arqueológico, como el del Tolmo de Minatera o el de Libisosa, en nuestra provincia, según ha recordado Luis Benítez de Lugo, profesor de Historia de la Universidad Complutense y una de las personas que está promoviendo la recuperación de la Laguna.
La Laguna del Acequión es un yacimiento arqueológico de la Edad del Bronce de los denominados como Motillas; pequeños montículos o colinas, de apenas 5 metros de altura y unos 50 metros de diámetro, que se alzan sobre la llanura, siempre en puntos donde el nivel freático esté cerca de la superficie.
La laguna ahora está seca pero tuvo agua hasta los años 60 del siglo pasado. Y las crónicas periodísticas de la época hablan incluso de una zona de esparcimiento y recreo donde los albaceteños iban a bañarse. El profesor Benítez de Lugo calcula que el agua estará a menos de un metro de profundidad.
La motilla del Acequión se encuentra a poco más de 15 kilómetros de la ciudad, junto a la carretera de Barrax. Y se trata de la primera zona poblada de Albacete, probablemente hace ahora unos 3.700 años.
El alcalde de Albacete, Emilio Sáez, ha explicado que si estas primeras prospecciones dan buenos resultados, la de ahora sería la primera fase para poner en marcha un plan para recuperar este yacimiento y convertirlo en parque arqueológico, con centro de interpretación, probablemente en el mirador del Centro de Interpretación del Agua.
Y en la laguna se habilitarían aparcamientos para poder atraer a turistas a visitar esta motilla, de las que solo hay ejemplos en La Mancha ciudarrealeña y albaceteña. Y que el pueblo íbero habitó tras los primeros pobladores. Todo ello, después de negociar con la familia Núñez Robles, propietarios de los terrenos.
El director científico del proyecto del Acequión, Luis Benítez de Lugo, es arqueólogo y profesor de la Universidad Complutense de Madrid. Uno de los mayores expertos sobre la cultura de las motillas y especialmente vinculado al Acequión, ya que participó en los primeros trabajos arqueológicos que se hicieron en este lugar entre 1984 y 1989, impulsados entonces por el Museo de Albacete. Entonces, además de certificarse la presencia de antiguos poblamientos humanos, se extrajeron infinidad de elementos de cerámica, metal, piedra y marfil que pueden verse en el Museo de Albacete, según ha explicado el Ayuntamiento en nota de prensa.
Durante la visita de este miércoles, Benítez de Lugo, ha explicado que, en 2014, gracias a unas investigaciones que realizó la Junta de Comunidades y el Instituto Geominero de España, concluyeron que en la edad de Bronce esta laguna estaba seca, por tanto, el poblado se construyó sobre el fondo de la cubeta de la laguna.