Un ‘Gran Hermano’ de pulpos para descifrar al invertebrado más inteligente

Madrid

La pandemia nos ha enseñado que científicos, políticos y empresarios son tres patas de una misma mesa, pero la mesa no siempre se sostiene. Ejemplos hay muchos, sin ir más lejos: el estudio de los pulpos.

Considerado el invertebrado más inteligente del mundo animal, su red neuronal excede los límites de su cabeza, permitiéndoles una sensibilidad y capacidad de aprendizaje que lo sitúa lejos de la almeja u otros moluscos similares. Pero su estudio y cría en cautividad es, científicamente hablando, complicada. Por eso proyectos como ECOSUMA, liderado por el grupo de Ecología y Biodiversidad Marina del Instituto de Investigaciones Marinas de Vigo (CSIC), se vuelven cruciales para entender el desarrollo de estos animales y poder replicarlo después en condiciones controladas.

Un monitoreo con sensores

El responsable del grupo, el biólogo e investigador Ángel González, cuenta que han liberado a dos ejemplares en una zona acotada -y dedicada a la investigación- de las Islas Cíes. “Uno de ellos se reprodujo en cautividad; el otro fue capturado ya en la edad adulta y ahora hemos vuelto a liberarlo”, explica, “el objetivo es comprobar como se comportan en libertad, qué trayectos hacen, de qué se alimentan. Solo así podremos después replicar esas condiciones en cautividad”. Gracias a la información que recogerán cámaras y sensores, la ciencia podrá descifrar las incógnitas que todavía existen sobre este animal.

Las polémicas granjas de pulpos

Ante el incremento del consumo de este cefalópodo, al que afecta el cambio climático y la sobrepesca, varias iniciativas intentan desde hace décadas hacer posible las granjas de pulpos. Si los planes de la pesquera gallega Nueva Pescanova se cumplen, es posible que en 2023 la primera granja de este molusco para uso comercial esté en marcha en el puerto de Las Palmas de Gran Canaria. Mientras, otras iniciativas intentan que los pulpos o langostas sean calificados como animales con sentimientos para que la ley los proteja. La polémica está servida.