GEAS: de los rescates en condiciones extremas a la protección del patrimonio marino

No existe la rutina para el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS) de Alicante, una unidad de reacción preparada para salir cuando se le requiere y en todo tipo de condiciones; rescates, rastreos, recuperación de objetos o de personas cuando han fallecido.

Es la cara y la cruz de una profesión que conjuga situaciones complicadas y de alta peligrosidad que pueden derivar en muerte o enfermedad con inspecciones de patrimonio cuando el mar está en calma y hay una buena visibilidad.

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Guardianes del patrimonio

El brigada Antonio García Sánchez, responsable del Grupo de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil de Alicante ha explicado en Hoy por Hoy Alicante que la gente aún tiene la imagen idílica del tesoro en el mar. En los últimos dos años, los GEAS, guardianes de nuestro patrimonio en el entorno marino, han realizado una veintena de intervenciones relacionadas con él a lo largo de la costa alicantina, principalmente en la zona norte de nuestro litoral.

Recuerda el hallazgo de más de 50 monedas de oro de los siglos IV y V en el fondo marino del Portitxol de Jávea que localizaron dos buceadores. A partir de ahí se activó el dispositivo de la Dirección General de Cultura y Patrimonio para estos casos y arqueólogos de la UA y el Grupo de la Guardia Civil, junto al Ayuntamiento, realizaron las inmersiones en la zona.

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"La colaboración con las administraciones es fundamental", asegura, y se ha intensificado en los últimos tiempos para la protección del patrimonio que hay en nuestra costa. Cada mes, buceadores de la Guardia Civil realizan una inspección del pecio Bou Ferrer en el litoral de la Vila Joiosa para evitar el expolio y salvaguardar sus vestigios.

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García Sánchez hace un llamamiento a los buceadores para que, en caso de encontrar un objeto que pueda ser de valor, lo haga llegar a las administraciones como patrimonio de nuestra historia

Alta peligrosidad

Pero también, estos agentes especializados deben actuar en condiciones extremas: "De tu intervención, a veces, depende que un familiar recupere a su ser querido y es una responsabilidad".

El brigada García explica que una intervención puede complicarse hasta consecuencias no deseadas en momentos de mala mar, escasa visibilidad y más aún si es de noche, como en el caso de las riadas. El Grupo de Actividades Subacuáticas también estuvo en la última DANA en la Vega Baja.

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Son los dos lados de una misma moneda: situaciones complicadas y extremadamente peligrosas y otras que dejan la satisfacción de que todo está en calma y la marea sigue su curso.

Esta es la conversación que hemos mantenido con Antonio García Sánchez, responsable del GEAS, en Hoy por Hoy Alicante:

*Todas las imágenes y el video que acompañan a esta noticia son propiedad de la Guardia Civil de Alicante.